La efectividad de la PAC depende de aumentar la investigación, según un proyecto de la UE Para garantizar la buena marcha de la Política Agrícola Común (PAC) de la UE en el futuro es necesaria una agenda política y de investigación de largo plazo, según indican los resultados del proyecto SASSPO («Agricultura para el desarrollo sostenible: un diálogo en torno a la ... Para garantizar la buena marcha de la Política Agrícola Común (PAC) de la UE en el futuro es necesaria una agenda política y de investigación de largo plazo, según indican los resultados del proyecto SASSPO («Agricultura para el desarrollo sostenible: un diálogo en torno a la demanda social, las presiones y las opciones de una política»), financiado por la UE. El objetivo del proyecto era evaluar las prioridades de investigación necesarias para respaldar la elaboración de la política agraria de la UE y, así, ayudar a Europa a avanzar hacia un planteamiento más integral y sostenible de la agricultura y del desarrollo rural. En el marco de SASSPO se organizaron diálogos en torno a la política que reunieron a colectivos clave interesados ,entre ellos representantes de los Estados miembros de la UE, la Comisión Europea, ecologistas, organizaciones de agricultores y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Partiendo de los resultados de los debates organizados, se elaboraron cuatro informes sobre la política que exponen la investigación que es necesario incorporar en el proceso de elaboración de la política agrícola. Otra conclusión clave es la necesidad de justificar mejor la PAC. Este proyecto recomienda que se investiguen diversas opciones para hacer más democrática la toma de decisiones relativas a la PAC, lo cual pasa por permitir la implicación de un espectro más amplio de colectivos interesados. Asimismo, se destaca la necesidad de investigar las consecuencias económicas, sociales y medioambientales de la PAC y se sugiere que se busquen formas de que la PAC se complemente mejor con otras políticas de la UE. A pesar de que las zonas rurales de Europa han sufrido grandes cambios en las últimas décadas, se dispone de pocos datos, a nivel regional y subregional, acerca de las pautas de cambio observables en la producción agrícola y las economías rurales. Del mismo modo, se carece de datos relativos a los nuevos Estados miembros de la UE, muchos de los cuales están experimentando dificultades a raíz de que las estadísticas recopiladas antes de su adhesión no se ajustaban a los patrones de la UE. Esa información podría aprovecharse posteriormente para decidir el nivel de administración más adecuado (comunitario, nacional, regional o municipal) para acometer las diferentes medidas políticas. Uno de los impulsores clave del cambio agrícola es el desarrollo tecnológico y, por ello, tras este proyecto se recomienda investigar los efectos de las nuevas tecnologías en la economía, la naturaleza, los productores y los consumidores. Con respecto a la sostenibilidad, a raíz del proyecto se indica que «es necesario lograr una mejor comprensión de medidas que favorezcan la biodiversidad, así como el impacto que tienen en la biodiversidad los sistemas de producción agrícola». Además, se espera que la agricultura contribuya a combatir el cambio climático a base de producir cultivos energéticos; mientras, la UE se ha fijado la meta de incrementar sustancialmente el uso de biocombustibles. En este proyecto se propone que se investiguen los costes y los beneficios de los diversos tipos de biocombustible, así como el efecto de los mismos en los precios de productos básicos en todo el mundo. El equipo de SASSPO sugiere, además, que se investigue el potencial de diversas regiones para producir biocombustibles y sus efectos sociales, ecológicos y económicos en las zonas rurales. Por último, en este proyecto se recomienda aumentar el diálogo en torno a la política, de manera similar a como se hizo durante el proyecto, en futuros procesos de toma de decisiones. En el proyecto se recomienda que dichos debates tengan lugar fuera de las estructuras habituales y se indica que se debería incluir a toda clase de colectivos interesados, especialmente a organizaciones no gubernamentales (ONG). Puesto que se prevé reformar la PAC en 2013, por fuerza este diálogo en torno a la política deberá estar orientado hacia el futuro.
