Lactancia y desarrollo cognitivo Un consorcio de la Unión Europea estudió el vínculo causal entre la lactancia y la prevención de déficits cognitivos en la infancia. Los niños que se alimentaron de leche materna durante los seis primeros meses de vida mostraron una incidencia reducida de hiperactividad entre los tres y los nueve años de edad. Sociedad Salud © fizkes, Shutterstock Los problemas cognitivos y de conducta durante la infancia están estrechamente asociados a desventajas de índole social en momentos posteriores de la vida, aunque podrían evitarse gracias a la prevención temprana. La lactancia podría representar la mejor fórmula de prevención, especialmente durante los primeros seis meses de vida. El proyecto financiado con fondos europeos INNODEVELOPMENT (The impact of breastfeeding on children’s cognitive and non-cognitive development: One step closer to addressing the notion of causality) analizó la relación causal entre la lactancia y la prevención de déficits cognitivos en la infancia. Para llevar a cabo su investigación, el equipo se sirvió de datos relativos a la cohorte de estudio irlandesa «Growing up». El equipo también analizó diversos factores que influyen en las madres a la hora de tomar decisiones relativas a la lactancia y los efectos de otras prácticas de los progenitores sobre el desarrollo cognitivo y de otra índole de los niños. Para la segunda parte de la investigación, el equipo utilizó datos recabados en el estudio longitudinal «Quebec Longitudinal Study of Child Development» y en un estudio similar realizado en Francia denominado «EDEN». De esta forma, el proyecto puso sus miras en mujeres canedienses y francesas. En lo que respecta al estudio en torno a la causalidad, los investigadores se centraron en el razonamiento no verbal y el vocabulario expresivo. El equipo valoró dos aspectos relacionados con la exteriorización al final de la infancia y principio de la adolescencia: la hiperactividad y los problemas de conducta. En la investigación se analizó la relación entre estos rasgos y la lactancia. Por lo general, los resultados referentes a niños de entre tres y cinco años de edad no arrojaron indicios de que se produzcan diferencias estadísticas significativas a causa de la lactancia, con la única excepción de que entre los niños cuya alimentación se basaba exclusivamente en la leche materna durante los seis primeros meses de vida —como mínimo— se daba un menor número de casos de hiperactividad a los tres años —según la información proporcionada por las madres—. Esta pauta no se repetía entre niños de cinco años. La reducción en la incidencia de hiperactividad y de problemas de conducta también se daba entre los niños de nueve años, pero no en los de trece. Además, existían más casos de hiperactividad entre niños que entre niñas. Un análisis reveló que los niños de doce meses con una capacidad elevada para la comunicación mostraron unas buenas competencias sociales a los dieciocho meses de edad. Estos niños incluso mejoraron su habilidades comunicativas al alcanzar los veinticuatro meses. El cariño de las madres no representaba un factor en sí mismo, aunque parece ser que los niños con mayor capacidad para la comunicación despertaban este sentimiento y, a su vez, esto propiciaba el desarrollo de sus competencias sociales. Los hallazgos derivados del proyecto ayudaron a identificar factores que influyen en los déficits y el desarrollo cognitivos entre niños, lo que podría favorecer que se determinen medidas correctoras efectivas. Palabras clave Lactancia, desarrollo cognitivo, infancia, hiperactividad, INNODEVELOPMENT, problemas de conducta
