La madera protegida por las llamas
Ante los daños que sufren los marcos de madera a la intemperie la industria de carpintería ha venido buscando nuevos y mejores recubrimientos de protección para la madera. En cambio, la investigación ha pasado a centrarse en el pretratamiento de la madera. Inspirándose en las tecnologías de la industria automovilística, el proceso adoptado consiste en pasar la madera por una llama en condiciones estrictamente controladas. La llama, sin quemar la madera ni alterar su aspecto, modifica la química de la superficie. Los líquidos se comportan de manera diferente cuando entran en contacto con una madera sometida a dicho tratamiento. Los recubrimientos de protección que se coloquen en la madera así tratada gozarán de mayor ligazón con la madera y ofrecerán una mayor resistencia a las condiciones climáticas. Las pruebas efectuadas con varios tipos de madera han demostrado que donde el tratamiento da mejores resultados es con el roble y el haya. Por sus altas dosis de sencillez y rentabilidad, este proceso no resulta nada difícil de incorporar a una cadena de producción ya funcionando. El salto que con ello podría dar la calidad de la madera probablemente impulse la difusión de esta tecnología en el sector de la carpintería.
