Diagnóstico precoz no invasivo del traumatismo craneoencefálico
El TCE, también conocido como traumatismo intracraneal, es una pérdida de la función cerebral producida por un golpe, una sacudida en la cabeza o la penetración de un objeto. Las variaciones en la presión intracraneal absoluta (PICa) afectan al riego sanguíneo cerebral, por lo que es útil en el diagnóstico y el pronóstico en pacientes con lesiones en la cabeza. Estas medidas solo eran posibles antes a través de técnicas invasivas complejas que llevan aparejados riesgos de infección, hemorragia, pérdida de líquidos y dolor, entre otros. Además, sólo el 20 % de los pacientes con TCE tenían realmente acceso a esas técnicas de diagnóstico. El proyecto BRAINSAFE , financiado con fondos comunitarios, ha puesto a los pacientes con TCE en igualdad de condiciones mediante un medidor de la PICa portátil, fácil de usar y no invasivo. El dispositivo emplea la ultrasonología Doppler para medir los parámetros del flujo sanguíneo en dos profundidades diferentes de la arteria oftálmica mediante un manguito de presión desechable y un casco. Este sencillo dispositivo no invasivo sustituye al procedimiento invasivo y complicado de valoración de traumatismos en la cabeza en centros hospitalarios y ambulancias medicalizadas. La comercialización del sistema de diagnóstico BRAINSAFE salvará miles de vidas y reducirá, de manera importante, las incidencias de discapacidad a largo plazo asociadas con el TCE. La consiguiente reducción de los gastos en atención médica, tanto a corto como a largo plazo, repercutirá notablemente en los pacientes y en la economía de la UE. Y, lo que es más importante, la rapidez del diagnóstico mejorará la calidad de vida de millones de enfermos y sus familiares.