Tendencias científicas: Europa eclipsada
Si tuvo la oportunidad de disfrutar de un cielo despejado en la mañana del viernes pasado, quizás pudo contemplar, con la debida protección, un eclipse solar total o parcial en función de dónde se encontrase en Europa. El espectáculo debió mostrarse en todo su esplendor en el Mar de Noruega, justo por debajo del Círculo Polar Ártico, si bien nadie pudo apreciarlo desde ahí. La región isleña noruega de Svalbard fue la segunda zona más adecuada para su observación. En The Guardian se informa de que cerca de dos mil personas no se amedrentaron ante la posibilidad de «congelarse o ser atacados por un oso polar» para contemplar el fenómeno desde estas islas «y recibieron la recompensa de un cielo despejado y unas vistas espectaculares». Incluso se aplaudió durante los más de dos minutos durante los que el Sol se ocultó tras la Luna. En cambio, más al sur, en las Islas Feroe, la única otra masa terrestre por la que discurriría la franja de eclipse total, la decepción fue enorme. En The Guardian informan de que en la capital, Torshavn, se reunieron unas ocho mil personas. En estas islas se erige una estación terrestre de la Agencia Espacial Europea (ESA) que albergó una expedición con motivo del eclipse. Los que allí llegaron tampoco pudieron disfrutar del espectáculo debido a, según declaró uno de los asistentes a The Guardian, la imposibilidad de ver nada por las condiciones nubosas, la lluvia y el viento. Durante los eclipses solares, la Luna se interpone entre el Sol y la Tierra. Dada la similitud de sus tamaños relativos, la Luna tapa de manera temporal la mayor parte de la luz del Sol. En la Tierra es posible disfrutar del espectáculo si se cuenta con algo de suerte. Según la ESA, toda Europa pudo contemplar un eclipse parcial. Mientras que en las islas de Svalbard el disco solar quedó oculto al 100 %, en el norte de Escocia quedó cubierto al 97 %, en Londres al 84 %, el 81 % en La Haya, el 75 % en París, el 65 % en Madrid y el 56 % en Roma. La franja de eclipse total abarcó sólo una banda pequeña sobre el Atlántico Norte. El eclipse también pudo observarse desde el espacio, tal y como demostró la astronauta de la ESA Samantha Critoforetti. Para ello compuso un experimento con el que registrar el eclipse desde la Estación Espacial Internacional y hacer un seguimiento de la umbría sobre la tierra. La sonda Proba-2 de la ESA registró un eclipse casi total desde su órbita al tiempo que su minisatélite Proba-V apuntaba hacia la Tierra para fotografiar la sombra del eclipse proyectada sobre el planeta. Para más información, consulte: http://www.esa.int/Our_Activities/Space_Engineering_Technology/Proba_Missions/Astronaut_plus_Proba_minisats_snap_solar_eclipse
Países
Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Chequia, Alemania, Dinamarca, Estonia, Grecia, España, Finlandia, Islas Feroe, Francia, Croacia, Hungría, Irlanda, Italia, Lituania, Luxemburgo, Letonia, Malta, Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, Rumanía, Suecia, Eslovenia, Eslovaquia, Reino Unido