Si no lo veo no lo creo
La investigación en la UE produce a veces resultados con gran potencial de mercado. Qué mejor ejemplo que la reciente comercialización de una película fotográfica de alta velocidad y alta resolución con la que se puede producir una nueva cámara de vídeo que será muy útil como instrumento de investigación a la industria manufacturera. Telón de fondo Para comprender del todo muchos fenómenos físicos y procesos industriales es necesario poder analizar fenómenos rapidísimos que se miden en milésimas de segundo. Por ejemplo, explosiones, impactos y colisiones a alta velocidad, piezas de máquinas que se mueven a toda velocidad por no mencionar los flujos de gases, líquidos o partículas. Son sucesos físicos velocísimos que sólo las cámaras de alta velocidad pueden fotografiar. Luego los investigadores pueden analizar la película a cámara lenta o imagen tras imagen. Las cámaras de cine son grandes y pesadas, la película es cara y el revelado dura mucho tiempo. Por el contrario, el vídeo permite en unos segundos enviar directamente imágenes a un ordenador para análisis. Pero las cámaras de vídeo actuales no pueden captar normalmente fenómenos rapidísimos porque no filman ni muy rápido ni muy enfocado en los detalles. Antes del fin del proyecto CamRecord que duró 12 meses, lo más que podía una cámara de vídeo era unas 200 imágenes por segundo para sistemas de altas resoluciones (512 x 512 pixeles). Descripción, impacto y resultados El proyecto CamRecord forma parte de las Acciones de Apoyo a la Competitividad (CSA) de la Comisión Europea que financian experimentos científicos y técnicos creadores de tecnología basándose en conocimientos científicos propiedad de la UE y de modo que puedan ser aplicados inmediatamente por la industria europea. Suelen ser productos secundarios de investigaciones realizadas por el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea. Por ejemplo, durante una investigación de óptica avanzada en ese centro que organizó la Comisión Europea se vislumbró una nueva tecnología: era posible construir una cámara que combinara alta resolución con alta velocidad (hasta 1.000 imágenes por segundo). Eso es el proyecto CamRecord que hizo realidad esta tecnología construyendo un prototipo de cámara de vídeo de alta resolución y alta velocidad. Luego se sometió a pruebas y hoy día, con financiación directa de la UE, se vende en el mercado como instrumento de investigación para la industria manufacturera europea. Socios La tecnología original es obra del Groupe d'Optique Appliquée del Centro Nacional de Investigación Científica francés (GOA-CNRS) en Estrasburgo. La aplicación de esta tecnología al proyecto CamRecord la hizo la empresa alemana Photonetics, fabricantes de cámaras de alta velocidad. La tarjeta memorizadora fue subcontratada a la École Nationale Supérieure de Physique de Strasbourg (ENSPS) en Francia.