Busquin distingue las virtudes de la CECA
Los logros de la CECA (Comunidad Europea del Carbón y el Acero) fueron destacados el 31 de octubre en Dunkirk con motivo de la presentación de los éxitos más recientes de cuatro resultados de su programa de investigación, en presencia del Comisario europeo de investigación, Philippe Busquin, y el Director del programa Growth del V Programa Marco, Ezio Andreta. A lo largo de los 50 años de andadura del Tratado CECA, se calcula en cerca de 1.000 millones de euros el volumen total de la labor de investigación. En la actualidad, la investigación siderúrgica financiada por el presupuesto de la UE asciende a unos 56 millones de euros anuales. Por cada euro invertido en esta investigación, 13 euros se inyectan en la economía en forma de reducción de los precios del acero y protección de las fábricas y puestos de trabajo europeos, según informó el señor Busquin. El Comisario añadió que sin el apoyo de la CECA, muchos proyectos de investigación no habrían visto la luz. "Los valores comunitarios de colaboración y solidaridad, que acompañaron al inicio de la CECA se han propagado por muchos sectores, pasando a ser los pilares de la unión económica y monetaria [...] En el marco de la Unión, los instrumentos en los que se ha centrado la CECA se han extendido, reforzado y ultimado con la materialización de nuevas herramientas de promoción de la investigación y la innovación", aseveró el señor Busquin. La Comisión se propone mantener esta tradición el 23 de julio de 2002 cuando expire el Tratado CECA y asuma la responsabilidad de la investigación. El señor Busquin reiteró la intención de la Comisión de seguir administrando la investigación en carbón y acero por las pautas trazadas por la CECA e informó de que el programa de investigación post CECA sería financiado con cargo a los ingresos de la venta de los activos de la CECA. Este año se ha concretado una dotación de 56 millones de euros en concepto de investigación en carbón y acero. El próximo año, se pronostica una dotación de 52 millones para la última convocatoria de propuestas. En el año que siga a la conclusión de la CECA, se pondrán a disposición del sector entre 45 y 46 millones de euros, dos tercios de los cuales serán concedidos al acero y un tercio al carbón. Todos los proyectos presentados en Dunkirk demostraron nuevos productos o técnicas relacionados con la siderurgia, que contribuirán no sólo a intensificar la competitividad de la UE, sino también a la protección del entorno. El primer proyecto propone el uso de la inteligencia artificial para controlar un alto horno. El sistema es capaz de formular predicciones, alertas y recomendaciones, en provecho de la seguridad de las operaciones. El proceso confiere más calidad al producto, que ya necesita menos tratamiento, por lo que se extiende la vida del horno. Asimismo se reducen las emisiones de CO2 y se eleva el nivel de seguridad de las condiciones de trabajo. El ahorro así obtenido, que ya ha superado las más optimistas previsiones, apunta a los millones de euros. En Dunkirke el sistema se ampliará hasta el año que viene, y UNISOR, coordinadora del proyecto, se encuentra negociando la venta de esta herramienta de inteligencia a varias empresas americanas. Otro proyecto, dirigido por el Centro de investigación metalúrgica (CRM - Bélgica) se ha centrado en el desarrollo de una carrocería de acero ultraligero (ULSAB). Los resultados han permitido reducir un 25 por ciento el peso de la carrocería de un coche, y, por consiguiente, el consumo de carburante. El proceso térmico utilizado aquí permite además que la carrocería resulte menos vulnerable al daño y la corrosión. De idéntico modo, la productividad aumenta un 30 por ciento y se extiende la vida útil del vehículo. Este proceso, rápidamente integrado, ya está en fase de producción. El proyecto coordinado por EKO Stahl GmbH (Alemania) ha puesto a punto un procedimiento más eficaz de tratamiento de un subproducto inevitable de la producción siderúrgica: el lodo de óxido. Mientras que en el proceso tradicional, se asa el lodo en un horno durante 45 minutos, a base de grandes cantidades de energía, con este nuevo proceso se recurre a un tratamiento "flash" vertical, de tres segundos de duración, que reduce el nivel de impurezas químicas en el polvo. El polvo de ferrita así producido ofrece excelentes cualidades para imanes de alto rendimiento. Este proceso permite incrementar la productividad un 60 por ciento y reducir el consumo de energía un asombroso 99 por ciento. Por último, un método de fundición directa de láminas más barato ha sido el producto desarrollado por un consorcio liderado por Salzgitter AG (Alemania). El nuevo proceso precisa tan sólo una fracción del espacio necesario para una línea de fundición de láminas tradicional. Asimismo reduce hasta un 90 por ciento el consumo energético y las emisiones de CO2, con un resultado de superficies y propiedades mecánicas de calidad superior, lo que lo convierte en un proceso sumamente interesante para las industrias automovilística, naval y aeronáutica. El señor Busquin calificó a los cuatro proyectos de excelsos representantes de una "muestra de la labor más reciente de investigación que demuestra, por si fuera necesario, el empuje de la industria siderúrgica europea" y confía en que la implantación del espacio europeo de investigación contribuirá asimismo a la coordinación de la investigación en carbón y acero. La Comisión aprobó la Comunicación relativa al ERA "para entablar un amplio debate sobre los obstáculos a un correcto empleo comunitario de los recursos, instituciones, herramientas y personal de investigación europeos, y en torno a los métodos de cooperación que permitan eliminarlos paulatinamente".