Una medicina bosquimana aportará un remedio de vanguardia contra la obesidad
Un cactus que nace en el desierto del Kalahari, en el África meridional, y utilizado por los indígenas bosquimanos San para combatir el hambre durante las prolongadas expediciones de caza, va a convertirse en remedio para luchar contra la obesidad. Esta planta de aproximadamente un metro ochenta de altura, llamada hoodia, contiene un ingrediente activo que la investigación ha demostrado que puede reducir el apetito hasta 2.000 calorías diarias. El fármaco fue patentado inicialmente por el Consejo Sudafricano de Investigación Científica e Industrial (CSIR), y ha sido licenciado por la empresa británica Phytopharm. En la actualidad el gigante farmacéutico Pfizer está desarrollando una píldora basada en esa planta, con la que espera eliminar el ansia de comer y lograr una cuota importante en el mercado mundial de adelgazantes, que se eleva a 6.000 millones de euros. Se cree que más de 100 millones de personas de todo el mundo se encuentran en situación de riesgo debido a circunstancias relacionadas con la obesidad, por ejemplo enfermedades cardíacas y diabetes. Pfizer espera que el fármaco, que ya ha sido probado en voluntarios sanos en Gran Bretaña, estará disponible en 2007 en forma de píldoras. Phytopharm y el CSIR fueron objeto de críticas cuando se reveló que ambos habían celebrado acuerdos financieros para el desarrollo del fármaco sin consultar a la tribu San, cuya sabiduría tradicional había llevado al descubrimiento de las propiedades supresoras del apetito de la hoodia. La explicación dada por el director general de Phytopharm, Richard Dixey, fue que él creía que ese pueblo nómada ya se había extinguido. Al descubrirse que aún había alrededor de 100.000 San en regiones de Angola, Sudáfrica, Botswana y Namibia, se ha llegado a un acuerdo por el cual los bosquimanos recibirán un porcentaje de los beneficios procedentes de la venta del fármaco. Se había puesto en duda la existencia misma de la tribu San, cuya población dispersa y carente de oportunidades de supervivencia padecía una amenaza muy real de extinción. En virtud del nuevo acuerdo se espera que cada año se generen millones de euros destinados a financiar programas educativos y crear puestos de trabajo, y a la compra de terrenos por los San. Todo ello garantizará un futuro más saludable para la tribu, y para quienes se beneficien del nuevo fármaco prodigioso. De una forma u otra, la supervivencia de los San debe mucho a las especiales características de la hoodia.