Según unos informes, los cultivos modificados genéticamente pueden reducir la pobreza de los países en desarrollo
Según dos informes recientemente publicados, los cultivos modificados genéticamente tienen el potencial de mejorar los procesos agrícolas, incrementar la seguridad de los alimentos y reducir la pobreza en los países en desarrollo. El primer estudio, realizado por el "International Council for Science", lleva por título "new genetics, food and agriculture: scientific discoveries - social dilemas", y en él se plantean cuestiones relacionadas con los cultivos modificados genéticamente como saber para quién son necesarios y si repercutirán en el comercio. El informe concluye que "la amplia gama de aplicaciones modernas de la genética en la agricultura podría contribuir más a mejorar la eficacia y la sostenibilidad de la agricultura en las economías emergentes". "Los cultivos modificados genéticamente ofrecen también la promesa de favorecer a la seguridad alimentaria y reducir la pobreza", afirma el informe que, además, añade que las asociaciones públicas y privadas representan la fuente con mayor probabilidad de originar nuevas variedades de cultivos orientados a solucionar los problemas propios del mundo en desarrollo. El segundo estudio es un borrador de documento de reflexión realizado por "Nuffield Council" del Reino Unido sobre bioética y su objetivo es evaluar los riesgos y los beneficios potenciales asociados a la utilización de los cultivos modificados genéticamente en los países en desarrollo. Las principales conclusiones del informe son las siguientes: "la utilización de cultivos modificados genéticamente puede, en ciertos casos, presentar un potencial considerable para aumentar el rendimiento de los cultivos, mejorando, por lo tanto, las prácticas agrícolas y las fuentes de ingresos de los pobres de los países en desarrollo". El Consejo Nuffield considera "una obligación ética explorar estos beneficios de forma responsable" y alega que "por el momento, no existen suficientes pruebas sobre un daño real o potencial que justifique la moratoria sobre la investigación, las pruebas de campo o la liberación controlada de los cultivos modificados genéticamente en el medioambiente". "Recomendamos, por consiguiente, [...] que los gobiernos, la Comisión Europea y otras instituciones asignen realmente recursos adicionales con el fin de financiar una expansión a fondo de la investigación pública dedicada a los cultivos modificados genéticamente relacionados con los alimentos básicos tropicales y subtropicales, adaptados a las necesidades de los pequeños agricultores" concluye el informe del Consejo Nuffield.
Países
Reino Unido