Los ciudadanos ayudan a la Comisión a evaluar la contaminación en ciudades europeas3
3 Las leyes sobre la calidad del aire sólo pueden ser realmente eficaces si son comprendidas y respaldadas por aquellos a los que se supone que deben proteger - los ciudadanos europeos3 , dijo el Comisario de Investigación de la UE, Philippe Busquin, cuando presentó el 30 de junio en Bruselas los primeros resultados del proyecto PEOPLE (exposición de la población a contaminantes del aire en Europa). Lanzado el 22 de octubre de 2002, el proyecto PEOPLE seleccionó a más de 125 ciudadanos de Bruselas para participar en el primer experimento piloto de un día con el fin de evaluar niveles de exposición al benceno, un compuesto cancerígeno que está asociado a un riesgo cada vez mayor de desarrollar leucemia. El benceno está pues considerado como un buen indicador de la presencia de otros contaminantes como el monóxido de carbono, los óxidos de nitrógeno y material formado por partículas. Los participantes fueron seleccionados en función de un conjunto de criterios bien definidos (fumadores, no fumadores; usuarios del transporte público; ciclistas). Cada participante llevó puesto un sensor durante 12 horas. Las mediciones se realizaron durante 24 horas en gran variedad de instalaciones interiores y exteriores, tales como tiendas, bares, escuelas, medios de transporte públicos y oficinas. Previamente se habían utilizado instrumentos de medición estacionarios para medir los niveles de contaminación en pueblos y ciudades. Como explicó el Sr. Busquin, el experimento es el primero en su género que introduce a los ciudadanos en el proceso de evaluación de la calidad del aire. 3 Con el proyecto PEOPLE, la ciencia ha descendido de su torre de marfil poniéndose más al servicio del público y permitiéndole además que se convierta en el principal investigador en el proceso3 , dijo el Sr. Busquin. 3 Los proyectos de investigación como PEOPLE son la clave para proporcionar a los responsables de la toma de decisiones, a los profesionales de la salud y el medio ambiente y al público en general, una idea más clara de la contaminación del aire urbano y de su repercusión en la salud. El conocimiento adquirido por esta importante investigación nos ayudará a trazar nuestras decisiones en lo referente al tráfico y al transporte y animará a la gente a elegir un estilo de vida más sano3 , añadió. Las lecturas de los sensores revelaron que aquel día en cuestión, excepto en zonas de tráfico denso, los niveles de contaminación externa en Bruselas se ajustan al valor anual de cinco microgramos por metro cúbico, conforme a lo estipulado en la directiva de la Comunidad sobre contaminación del aire. Más específicamente, se observó que los niveles de concentración de benceno equivalían a tan sólo la mitad de los percibidos hace diez años. Como dijo Giovanni De Santi, jefe de la unidad de emisiones y salud del CCI a Noticias CORDIS: 3 Estamos observando el beneficio de medidas ya introducidas por la legislación de la UE, las autoridades regionales y la industria para reducir el nivel de contaminación, medidas como las mejoras de la tecnología automovilística, el control del tráfico y normas sobre la emisión más estrictas3 . Por lo que se refiere a los niveles de contaminación interna, los niveles más altos de concentración se encontraron dentro de los coches, así como en lugares donde estaba presente el humo del tabaco. Las concentraciones más bajas se percibieron en escuelas y oficinas. La exposición estaba vinculada también a un determinado estilo de vida. Por ejemplo, los resultados revelan que los fumadores forman con creces el sector de ciudadanos más contaminado, presentando un valor medio de 7,5 microgramos por metro cúbico. En ausencia del tabaco, el modo de transporte fue el principal factor que afecta a la exposición personal a la contaminación. No obstante, los resultados más sorprendentes y quizá los más preocupantes fueron los que se obtuvieron de casas de ciudadanos en las que se observó que las concentraciones de benceno eran dobles a las del aire de la ciudad, con un valor medio de casi siete microgramos por metro cúbico. Aunque este tipo de información sobre los niveles de contaminación interna resulte útil, el Sr. Busquin dijo a Noticias CORDIS que legislar sobre este tipo de contaminación es un asunto mucho más delicado que la política relativa al aire externo: 3 Tenemos que tener en cuenta que la privacidad de los ciudadanos ha de ser respetada3 . Aunque la Comisión pueda suministrar los datos, la responsabilidad de divulgar estos resultados y desarrollar métodos para que los ciudadanos tomen conciencia de los factores que influyen en su medio ambiente y del impacto de sus hábitos y estilos de vida en el mismo, recae sobre las autoridades regionales y locales. También Jean Vanwetwinkel, que estuvo presente en la manifestación de Bruselas, se sorprendió de las altas concentraciones de benceno en interiores. Su participación en la experiencia estaba motivada porque quería saber en qué medida la contaminación afecta su salud. Al igual que el Comisario, Vanwetwinkel también cree que las autoridades locales tienen que conseguir que aumente el conocimiento del público respecto a la presencia de benceno. 3 Los ciudadanos deben respaldar la responsabilidad de controlar el nivel de benceno en sus casas y en sus estilos de vida, pero valdría la pena que las autoridades locales y regionales consideraran la posibilidad de prestar un servicio al público, mediante el cual los ciudadanos podrían verificar el nivel de concentración de benceno en sus casas3 , sugirió. Según el Dr. De Santi, las autoridades regionales han empezado ya a emplear el proyecto PEOPLE para ayudar a la gente a comprender que pueden reducir su exposición a este tipo de contaminantes. Por ejemplo, en el experimento que tuvo lugar en Lisboa, más de 50 escuelas y 500 estudiantes participaron en actividades de simulación y video conferencia enfocadas hacia el tema de la contaminación del aire. Los estudiantes ayudaron reuniendo datos científicos y participaron con otros ciudadanos en un debate sobre los resultados del proyecto. El Dr. De Santi cree que el proyecto PEOPLE es un verdadero ejemplo de colaboración eficaz entre autoridades locales y la Comisión, preparando el terreno para un espacio europeo de investigación más sólido. 3 Las lecciones aprendidas en Bruselas nos ayudarán a adaptar nuestros métodos a otros experimentos. Esperamos poder poner en práctica lo aprendido ampliando la campaña de medición de sólo benceno a benceno y otros contaminantes graves, las partículas finas3 , comentó. Otras campañas de PEOPLE ya han sido dirigidas en Bucarest y Liubliana. Y se prevén más experimentos en Madrid y Budapest para finales de año. Otras ciudades, en las que se incluyen Belgrado, Dublín, París y Roma, también han expresado su interés por asociarse al proyecto.
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