La OCDE recomienda estrechar la cooperación internacional para la nueva generación de proyectos de astronomía
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha realizado una serie de recomendaciones en materia astronómica que proponen estrechar la cooperación internacional en los proyectos de investigación de gran escala. Las recomendaciones se incluyen en un informe basado en las conclusiones de dos seminarios sobre programas y proyectos de gran escala en el campo de la astronomía y la astrofísica, organizados por encargo de la delegación alemana ante la OCDE. 'Los instrumentos terrestres y espaciales cuestan cientos de millones de dólares, su diseño y construcción requiere más de diez años, y a menudo son aprovechados por una comunidad mundial,' señala la propuesta alemana. Los servicios y proyectos se planifican y se aplican cada vez más de forma internacional, aunque en este momento sólo existen vías ad-hoc para alcanzar un acuerdo sobre las prioridades o la repartición de gastos.' Aunque en las últimas décadas se ha avanzado de forma considerable en el campo de la astronomía y la astrofísica, algunas Grandes Preguntas siguen sin tener respuesta, por ejemplo las relativas a la distribución o el origen de la vida. Estas preguntas definen la necesidad de nuevos proyectos y programas, según el informe, y la cooperación internacional es fundamental por las enormes dimensiones de los proyectos. El informe reconoce que la cooperación puede no ser atractiva para algunos debido a la autonomía que hay que sacrificar para trabajar de forma conjunta. Sin embargo, los proyectos multinacionales permitirán a todos acceder a las últimas tecnologías y los últimos equipos, y evitarán la duplicación de la investigación, que conlleva grandes costes. La OCDE señala que, si los países van a trabajar conjuntamente, es necesario tener una estrategia. Por tanto, deberían ser los organismos financieros los que elaboraran un programa equilibrado, integrado y coordinado de forma global, que se base en el asesoramiento de la comunidad científica. Así mismo, se deberían mantener los vínculos con otros campos, como la física nuclear y de alta energía, las ciencias terrestres y la biología, e intensificar la comunicación entre los organismos para la observación terrestre y del espacio. Las recomendaciones defienden que se abarque la investigación fundamental y la investigación aplicada en la selección de los proyectos de astronomía y astrofísica, o, como se definen en las recomendaciones, proyectos con fines específicos y proyectos con fines generales. La selección y el funcionamiento de los nuevos proyectos debería basarse en el tema científico y en las posibilidades de descubrimiento por medio de la serendipia,' señala el informe. La planificación estratégica global no solamente ofrecería a los organismos una perspectiva más amplia, sino que además permitiría a los países más pequeños conocer lo que se está planificando en otros lugares, y quizá identificar áreas de participación. La mayor ventaja provendría del punto de vista estratégico, que trascendería los límites de los proyectos e incluso de los temas individuales, lee el informe de la OCDE. Otro de los campos que se considera requiere nuevas medidas es la gestión de datos. El enorme volumen de información digital que fluye de los nuevos observatorios presenta el reto de recabar, utilizar, almacenar y compartir los datos. Se ha avanzado hacia la creación de un observatorio virtual, pero los organismos y los gobiernos deben reconocer que esto es una cuestión de largo plazo, según el informe. Por tanto, es necesario coordinar los planes a largo plazo para poder transformar la colaboración actual sobre el observatorio virtual en una actividad global totalmente representativa. Los nuevos proyectos también tienen que tener en cuenta este aspecto de la investigación en sus primeras fases de planificación y, por tanto, consultar con los posibles usuarios en el proceso, recomienda el informe. Antes de abordar las prioridades de investigación y los proyectos individuales, hay que decidir varias cuestiones de índole general, se subraya en el informe. Estas cuestiones se refieren a asuntos jurídicos, de organización y de gestión. La principal cuestión referente al acceso y a la participación de los países ajenos al grupo inicial de los defensores de esta iniciativa - no solamente en términos de instalaciones, sino de fases de construcción e investigación - debe resolverse al principio, concluye la OCDE.