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Cuidadores robóticos para personas mayores

Los robots constituirán una necesidad para una población cada vez más envejecida que requerirá ayuda para mejorar su movilidad. En el largo camino para ayudar a los ciudadanos de la tercera edad a mantener su calidad de vida, unos investigadores europeos han desarrollado un prototipo de robot único.

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En 2016, Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea, estimó que aproximadamente una quinta parte de la población europea tenía 65 años o más. Para hacer frente a este imparable cambio demográfico a gran escala, el proyecto GrowMeUp ha desarrollado una tecnología robótica rentable. El objetivo era conectar a las personas mayores con una red virtual de asistencia social y proporcionar apoyo a las tareas personales y de asistencia a fin de garantizar su bienestar y seguridad. El resultado es el robot GrowMu. «Si bien es cierto que existen otros robots y sistemas autónomos, los resultados de la investigación de GrowMeUp han superado los obtenidos en otros proyectos anteriores», comenta el profesor Jorge Dias, coordinador del proyecto. GrowMu crece y se desarrolla a medida que cuida GrowMeUp desarrolló algoritmos avanzados para que GrowMu pueda adaptarse a los cambios y al comportamiento de las personas mayores para así aprender su rutina. Esto significa que el robot puede detectar situaciones que podrían mejorarse y actuar en caso de peligro, por ejemplo, realizando una llamada para solicitar ayuda especializada. Las situaciones que requieren asistencia van desde sugerencias para nuevas recetas hasta una advertencia de que un paso podría causar una caída. «El aprendizaje adaptativo y los algoritmos de toma de decisiones con objetivos múltiples funcionan de forma que el robot puede aprender de los patrones de habla y comportamiento del usuario y reconocer cuándo las circunstancias requieren una acción», explica el profesor Dias. Por ejemplo, a través del reconocimiento facial y los diálogos orales, GrowMu puede recordar necesidades de una persona mayor, como los eventos planificados de la semana y, por consiguiente, recordárselas. A medida que GrowMu «crece» con el cuidado del anciano y otros usuarios, el robot puede sugerir modificaciones del estilo de vida que ayuden a mantener, e incluso mejorar, la calidad de vida. Los ejemplos podrían incluir determinar un régimen de ejercicios y organizar eventos con fines de socialización. Conexión a la nube: lo último en servicios en red Todas las funciones de GrowMu están vinculadas a la nube. La cantidad aparentemente infinita y el tipo de datos descargables a los que se puede acceder incluye recordatorios del paciente para tomar el medicamento correcto en el momento adecuado. La red de asistencia social accesible está compuesta por otras personas mayores, familiares, amigos, vecinos y cuidadores profesionales. La base de conocimiento de la nube no solo integra a los ciudadanos de la tercera edad con su red social y la asistencia de apoyo, sino que proporciona un conjunto de servicios de actividades diarias diseñados para satisfacer las necesidades específicas de cada persona. La tecnología y las personas mayores, ¿están preparados el uno para el otro? El profesor Dias comenta: «Definitivamente hemos acercado los cuidadores robóticos a la sociedad. Gracias al diálogo inteligente, las personas mayores pueden interactuar sin esfuerzo e intuitivamente con el sistema utilizando un lenguaje natural». El proyecto GrowMeUp ha demostrado que los robots pueden usar información contextual para adaptar su interacción y discurso. Además, los resultados ponen de manifiesto la aceptación cada vez mayor de los robots sociales por parte de los mayores. El profesor Dias recuerda una prueba con un grupo de personas mayores: «Bueno, no solo estaban preparados, sino que además se involucraron y comenzaron a hacer sugerencias». Los investigadores, ilusionados, retornaron a sus laboratorios para volver a diseñar, desarrollar, probar y presentar un sistema mejorado a fin de obtener una reacción mucho más positiva. Robots a las puertas de la sociedad Las principales barreras tecnológicas son la seguridad de la movilidad y la interacción basada en el habla. Otros problemas complejos son el elevado coste y el marco regulador, que aún están en ciernes. Siendo realistas, pasarán entre cuatro y seis años antes de que los primeros robots comerciales puedan ayudar verdaderamente a las personas en su vida cotidiana de una manera eficaz y completamente segura. Sin duda, existe un mercado siempre y cuando los responsables de la inversión en materia sanitaria sean capaces de darse cuenta de que esta tecnología puede encarar de forma rentable los problemas de los ciudadanos de la tercera edad en casa. La Comisión Europea y la Asociación Europea para la Innovación sobre Envejecimiento Activo y Saludable han estado trabajando en ideas y soluciones para abordar cuestiones como la homologación, la legislación y la certificación. Resumiendo, el profesor Dias señala: «Esperamos poder avanzar rápidamente en estos asuntos, porque los robots están llamando a las puertas de la sociedad».

Palabras clave

GrowMeUp, robot, GrowMu, personas mayores, sistema, nube

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