La industria de la biotecnología lamenta la 'falta de coherencia política de los Estados Miembros en torno a los OMG
Tras la decisión tomada por los ministros europeos de medio ambiente de rechazar la importación a la UE de la colza GT73 de Monsanto, modificada genéticamente (MG), la industria biotecnológica ha arremetido contra lo que considera una 'falta de coherencia política en el marco regulador de los cultivos MG. El 20 de diciembre, los ministros presentes en el Consejo de Medio Ambiente de la UE rechazaron la importación y el uso como alimento de la colza GT73, tolerante al herbicida del propio Monsanto, el glifosato. Como fue imposible alcanzar una mayoría cualificada, será la Comisión quien tenga la última palabra. De acuerdo con un comunicado de EuropaBio, la Asociación Europea de Bioindustrias, la industria está preocupada por la falta de coherencia entre lo acordado por los Estados Miembros cuando aprobaron el proceso de autorización actual y lo que hacen cuando se trata de autorizar un producto en la práctica. 'A pesar de las recomendaciones positivas de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), algunos Estados Miembros continúan votando en contra o absteniéndose en la votación señala el comunicado de EuropaBio. Según Simon Barber, director de la unidad de biotecnología de plantas en EuropaBio: 'Los Estados Miembros no afrontan sus responsabilidades. Están ignorando las leyes sobre cultivos MG que ellos mismos y el Parlamento Europeo han establecido en los últimos cinco años'. 'Si se mantienen en esta postura, los Estados Miembros estarán negando a los agricultores europeos la posibilidad de usar una tecnología que les ayude a ser competitivos' concluyó el Sr. Barber. La colza GT73 se plantó por primera vez de forma comercial en Canadá en 1996 y desde entonces ha sido aprobada en Australia, EE.UU. México, Filipinas, Corea y Japón. En la UE, el aceite de colza GT73 se aprobó para su uso en alimentos en 1997.