Previsiones del impacto del cambio climático sobre los bosques
La prevalencia de unas temperaturas más elevadas implica una mayor demanda de agua en los bosques, lo cual provoca una mayor sequía (y riesgo de incendios forestales) en numerosas regiones del mundo, incluyendo la cuenca mediterránea. La identificación de las zonas y las especies forestales que pueden ser vulnerables a un suministro reducido de agua es esencial para comprender los futuros cambios en la composición y estructura de los bosques, así como sus efectos sobre los servicios ecosistémicos clave. El proyecto de Horizonte 2020 PHLOEMAP, financiado con fondos europeos, empleó rasgos funcionales para mejorar las predicciones de dónde y cuándo es probable que se produzcan cambios drásticos en los servicios ecosistémicos forestales a causa de la sequía. Los rasgos funcionales son características medibles que pueden afectar al crecimiento, la reproducción o la supervivencia de los árboles, y proporcionan importante información sobre procesos ecológicos y demográficos. La capacidad de adaptación mejora la resiliencia de los árboles La iniciativa investigó cómo las plantas ajustan su estructura y funcionamiento en respuesta al clima y cómo este ajuste afecta, dentro de una determinada especie o entre especies, a su capacidad de soportar la sequía. «Tomamos muestras de seis especies dominantes de árboles en Cataluña, en el noreste de España, junto con un amplio gradiente de disponibilidad de agua, empleando parcelas de la red del Inventario Forestal Nacional de España, lo cual nos permitió combinar nuestras detalladas mediciones de rasgos con información sobre la dinámica en las plantaciones», afirma el coordinador del proyecto, el doctor Jordi Martínez Vilalta. Los investigadores examinaron la anatomía y la estructura de la madera, en particular la función del tejido de parénquima y floema en el funcionamiento de los árboles y los bosques durante una sequía. El floema es el tejido vivo que transporta los compuestos orgánicos solubles producidos durante la fotosíntesis en las hojas, mientras que el tejido de parénquima comprende células vivas de pared delgada que participan activamente en la secreción, el almacenamiento de alimento y otras actividades. Los científicos también recopilaron un amplio conjunto de datos sobre la variabilidad de rasgos del floema y xilema, además de gradientes de disponibilidad de agua a escala regional, abordando la variabilidad tanto dentro de una especie como entre especies. El xilema transporta agua y minerales disueltos desde las raíces al resto de la planta, y proporciona apoyo físico. «Nos centramos en la disponibilidad de agua para comprender mejor cómo se adaptan las especies a diferentes entornos y cómo se sustituyen unas a otras en función de los gradientes medioambientales», explica la investigadora y doctora Elisabeth Robert. Previsiones de cambios en los bosques El conjunto de datos reveló relaciones entre los rasgos y las respuestas de los árboles a la sequía, lo cual permitió a los investigadores determinar la mejor combinación de rasgos para predecir la resistencia a la sequía dentro de una determinada especie de árbol y entre diferentes especies. Los científicos también comprobaron cómo influye la variabilidad en los rasgos del xilema y el floema en el rendimiento y la vulnerabilidad de los bosques teniendo en cuenta diversas hipótesis de cambio climático a diferentes escalas ecológicas. PHLOEMAP destacó la importancia de la variabilidad intraespecífia en los rasgos funcionales de las plantas y cómo se alteran las propiedades de tejidos como el xilema, el floema y las hojas en función de las gradientes de disponibilidad del agua. «Los cambios fisiológicos y estructurales determinan qué especies pueden ser más vulnerables a cambios en la disponibilidad de agua in situ, mientras que el centrarnos en especies de árboles dominantes a escala regional nos permitió predecir qué especies pueden ser capaces de sustituir a otras más susceptibles», señala el doctor Martínez Vilalta. El proyecto desempeñará un papel esencial para ayudar a los científicos a comprender y predecir cómo cambiarán los bosques en el futuro. Dado que los ecosistemas forestales son esenciales para la energía, el carbono y la regulación del agua, unos conocimientos más amplios sobre cómo influye el cambio climático en los bosques podría contribuir a planificar mejor y, así, contrarrestar los efectos adversos.
Palabras clave
PHLOEMAP, bosque, agua, rasgo funcional, ecosistema
