Skip to main content
Ir a la página de inicio de la Comisión Europea (se abrirá en una nueva ventana)
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS

Article Category

Contenido archivado el 2023-03-01

Article available in the following languages:

La Royal Society del Reino Unido apela a la cooperación mundial para evitar una mala utilización de la ciencia

La Royal Society del Reino Unido, que es una academia de investigación independiente, reclama medidas de cooperación mundial para garantizar que los científicos "mal orientados" no puedan desplazarse simplemente a otro país para llevar a cabo investigaciones que no ofrecen seg...

La Royal Society del Reino Unido, que es una academia de investigación independiente, reclama medidas de cooperación mundial para garantizar que los científicos "mal orientados" no puedan desplazarse simplemente a otro país para llevar a cabo investigaciones que no ofrecen seguridad. La academia va a presentar un documento sobre los códigos de conducta para evitar la mala utilización de la investigación científica en la reunión de expertos de la "Biological and Toxin Weapons Convention", que se celebrará del 13 al 20 de junio. Actualmente, la Royal Society está a favor de la ampliación del sistema británico para evitar que una investigación que pueda plantear dudas se pueda llevar a cabo en otros países. "A nivel nacional prevemos que, más que intentar inventar de nuevo la rueda, la ampliación de la actual legislación sobre salud y seguridad británica será una de las vías más efectivas de afrontar las áreas específicas en cuestión. Sin embargo, necesitamos la cooperación mundial para armonizar las normativas de los diferentes países", declaró la doctora Julia Higgins, vicepresidenta de Royal Society. "Se deben fijar unos niveles mínimos en los reglamentos sobre seguridad a fin de evitar que un científico mal asesorado pueda llevar a cabo una investigación que no es segura, por el simple hecho de desplazarse a otro país diferente." El informe de la academia propone la evaluación de los proyectos individuales de investigación para decidir si los beneficios potenciales superan los riesgos potenciales. Para ello, se han identificado tres fases en el proceso de evaluación: cuando un científico solicita la financiación; la evaluación de riesgos a nivel local o nacional; y cuando se presenta un artículo a una revista para su publicación. Los mediadores y los editores deberán considerar si los resultados comportan utilizaciones destructivas y si, en circunstancias extremas, esto puede implicar que sea enmendado o rechazado", explica la doctora Higgins. Después de destacar la necesidad de una estrecha colaboración para poner en marcha este plan de trabajo, la doctora Higgins añadió que "el grado de aplicación de éstas medidas en el presente varía enormemente entre organizaciones, así que el objetivo es desarrollar estándares coherentes más altos que sean aplicables a nivel general." En términos más generales, la doctora Higgins señala que los códigos de conducta contribuyen a elevar la sensibilización y promover el debate, y que es necesaria una puesta en común sobre el potencial que genera una mala aplicación de las investigaciones relativas a las ciencias de la vida. "El proceso para definir un código, incluida la consulta extensible a los grupos específicos para garantizar su funcionamiento, debería repercutir también en un aumento en el número de personas que son concientes de que existen áreas problemáticas. El código tiene también un papel importante en la formación y la educación, y sirve para recordarles a los científicos sus responsabilidades éticas y legales y para que se planteen las consecuencias potenciales de su investigación", añadió.

Países

Reino Unido

Mi folleto 0 0