Varios proyectos comunitarios se reúnen en torno a una nueva vacuna nasal contra el VIH y la tuberculosis
El VIH y el SIDA están provocando una crisis sanitaria sin parangón en la historia reciente de la Humanidad, situándose entre 2,4 y 3,3 millones de personas el número calculado de víctimas mortales sólo en 2005, un tercio de las cuales se han producido en África subsahariana, según datos de la Organización Mundial de la Salud. El proyecto comunitario «Mucosal Vaccines for Poverty related Diseases» (MUVAPRED, o vacunas mucosas contra enfermedades relacionadas con la pobreza) está realizando su primera tanda de ensayos encaminados a estudiar una nueva vacuna nasal cuyo objetivo es neutralizar el VIH al entrar en el organismo. La vacuna utiliza un pequeño pedazo de la envoltura protectora del VIH, modificado para aumentar la protección contra la infección por VIH. Asimismo, emplea la molécula LTK63 como «adyuvante mucosal» para aumentar la respuesta inmunológica de los componentes de la vacuna contra el VIH y encaminar la respuesta al tracto genital, punto clave de infección por el virus. La administración nasal de la vacuna no sólo elimina la necesidad de emplear jeringuillas sino que capitaliza la capacidad que tiene la inmunización nasal de inducir, a través de «adyuvantes mucosales», respuestas inmunes protectoras en el tracto genital. El estudio, que cuenta con 30 sujetos, determinará la inocuidad e inmunogenicidad de la vacuna en humanos. Posteriormente, se cotejarán las respuestas celulares y de anticuerpos a los componentes del VIH con y sin adyuvante mucosal LTK63. No sólo eso, sino que, como rasgo distintivo de este estudio y utilizándose técnicas innovadoras, se medirán las respuestas de las mujeres al VIH en muestras de cérvix y vagina. En caso de éxito, la vacuna pasará a someterse a procedimientos de extensa evaluación realizándose ensayos de fase 2 y ensayos de fase 1 con voluntarios en África. Por último, la vacuna podría brindar protección contra las infecciones por VIH por transmisión sexual, vía principal de transmisión del virus y la pandemia del sida.