Los fabricantes de alfombras reducen costes
El consumo de energía ha sido siempre una de las principales preocupaciones de muchos sectores industriales. Aparte ya de lo dispuesto en la correspondiente normativa, reducir el consumo de energía es un imperativo simplemente por la necesidad competitiva de recortar costes y aumentar beneficios. Siendo la energía uno de los gastos más importantes en la industria de la alfombra, la investigación se propuso descubrir medios con los que esta industria pudiera beneficiarse considerablemente de la reducción de las necesidades energéticas. Los grandes secadores con los que se procesan las alfombras y sus correspondientes sistemas de ventilación suponen un ingente consumo de energía. Por ello, en el marco de este proyecto se investigó la posibilidad de incorporar adaptaciones a los sistemas disponibles y se encontró parte de las respuestas en un principio termodinámico básico, el principio de Venturi. Según este principio, cuando el aire comprimido que se inyecta a través de un tubo externo, pasa por un conducto más estrecho, se crea una presión negativa en la punta. Esto genera un vacío dentro del respiradero sin necesidad de usar partes móviles, con lo que se ahorran costes de energía y mantenimiento. De este modo el consorcio ideó un nuevo tipo de caja de toberas para aprovechar el efecto Venturi, que puede ser adaptada fácilmente a los actuales sistemas de calentamiento. Adicionalmente, la nueva caja de válvulas tiene una velocidad uniforme en la salida de la tobera, lo que permite un flujo de aire homogéneo por toda la alfombra. La reducción del consumo de energía tiene también como consecuencia directa la disminución de las emisiones de monóxido de carbono y el consumo de metano. Al evaluar las ventajas del sistema, se registró una reducción mínima del consumo de energía del 15 por ciento empleándose el novedoso flujo de aire y la caja de toberas en secadores ya existentes.
