Innovadoras técnicas de inspección
Las propiedades que se exigen a los materiales de construcción son cada vez mayores. El objetivo primordial es crear materiales que sean más fuertes y más ligeros que los materiales tradicionales (como el acero). En este sentido, los compuestos de matriz metálica (MMC, del inglés "metal matrix composites") representan una clase de materiales de vanguardia. Los MMC están compuestos de una matriz metálica y un refuerzo o material de aporte. El refuerzo puede ser continuo (monofilamentoso o multifilamentoso) o discontinuo (particulado, filoso, de fibras cortas u otros). El aluminio y sus aleaciones son los principales metales utilizados en los MMC. Comparados con los metales tradicionales, no reforzados, los MMC presentan mayor nivel de resistencia, rigidez, capacidad de amortiguación y resistencia al desgaste y las altas temperaturas. Los MMC son también sustancialmente más ligeros que sus contrapartes exclusivamente metálicas. Una prominente investigación financiada parcialmente por la Comisión Europea ha dado pie al descubrimiento de nuevos procesos y materiales MMC. De gran importancia es la optimización de varias técnicas de inspección no destructiva utilizadas para detectar debilidades en los MMC. La tomografía de haz cónico promete resultados positivos, aunque depende en gran medida de que se calibren correctamente los instrumentos utilizados; además, el proceso todavía no sirve para aplicaciones de fibra única. La detección ultrasónica de defectos del material aprovecha las diferencias de impedancia acústica de los MMC. Se pueden detectar defectos muy pequeños empleando altas frecuencias. Se definieron también otros métodos, como el ensayo SPICA (de expansión térmica) y los rayos X de 2D (para observar rajaduras). Además de los métodos de inspección, el trabajo buscaba también la comparación de los nuevos MMC con las normas (no MMC) industriales actuales (titanio, por ejemplo). Se escogió un componente típico de estructura de nervio como pieza de ensayo. Los resultados muestran un gran potencial, particularmente en forma de ahorro en los costes de producción (31 por ciento) y peso de los componentes (26 por ciento). El consorcio de investigación se encuentra actualmente refinando y divulgando los resultados del proyecto. Entre los sectores objetivo están las industrias aerospacial, militar y del microchip. Con estas nuevas técnicas y MMC, Europa podrá asumir, en las próximas décadas, un papel directivo en el avance de la ciencia de materiales.