Coordinación de la investigación sobre nanotecnologías de polímeros
La nanotecnología crece con rapidez a raíz de las interesantes y, con frecuencia, superiores propiedades que presentan las estructuras a escala átomica y molecular en comparación con las propiedades de los materiales masivos. Concretamente, los polímeros y compuestos nanoestructurados poseen amplias aplicaciones en optoelectrónica y telecomunicaciones, materiales de embalaje, agricultura, automoción, industria aeroespacial y biomateriales. El proyecto Nanofun-POLY («Materiales y nanocompuestos basados en polímeros nanoestructurados y funcionales») se puso en marcha con el objetivo de establecer el «Centro europeo de polímeros nanoestructurados» (European Centre for Nanostructured Polymers, ECNP), una NoE dedicada a coordinar las actividades de formación, investigación y difusión de nanotecnologías avanzadas de polímeros. Los participantes en Nanofun-POLY incluían 120 científicos de dentro y fuera de Europa. Los extracomunitarios difundieron conocimientos que quizás no estaban al alcance de ciertas regiones. Se abarcaron temas científicos muy variados, desde la química macromolecular y supramolecular hasta métodos de diseño adaptados a polímeros nanoestructurados y composites poliméricos. Los integrantes del consorcio pusieron en marcha un programa conjunto de formación para estudiantes de doctorado e investigadores y coordinaron actividades científicas y la compartición de instalaciones, herramientas y plataformas al servicio de la investigación. Además, el ECNP gestionó la cartera de conocimientos de los participantes, desarrolló programas de movilidad e intercambio de personal, organizó un congreso anual y publicó varios sitios web. Las actividades de comunicación y difusión trataron sobre la transferencia de conocimientos relacionados con tecnologías de procesamiento que incluyeron campañas para la concienciación de la opinión pública y la comprensión de temas científicos. Se espera que la existencia de una comunidad integrada de investigadores europeos bien comunicados con el resto del mundo sirva de impulso a la investigación, la educación y la transferencia de tecnologías avanzadas relacionadas con los polímeros nanoestructurados, lo cual reportará beneficios importantes para la economía europea y los consumidores.
