La auditoría técnica de ACTS: una evaluación totalmente independiente y transparente
El programa de Tecnologías y Servicios Avanzados de Telecomunicaciones (ACTS) llevó a cabo su auditoría técnica correspondiente a 1998 en la semana del 26 al 30 de enero de 1998. El 12 de febrero de 1998 los relatores designados de cada panel de expertos independientes asistieron a la reunión del Comité de Gestión de ACTS con el fin de presentar sus resultados personalmente. De los 148 proyectos del programa ACTS sometidos a auditoría: - unos 55 recibieron un informe impecable, recomendándose que continuasen básicamente sin cambio ninguno; - otros 84 proyectos recibieron apoyo para que continuasen, pero con la recomendación de que "modificasen" sus planes técnicos. Las razones para tal modificación fueron tanto positivas como negativas, e incluyeron casos en que los encargados de los proyectos mismos las sugirieron (en la mayoría de los casos se redujo a una prórroga), petición con la cual estuvieron de acuerdo los auditores. El compromiso contractual para la próxima fase de estos proyectos tiene que ser negociada ahora por la Comisión con base en las recomendaciones de los auditores y en la consiguiente opinión del Comité de Gestión. - Solamente nueve proyectos no lograron aportar pruebas suficientes de su contribución a los objetivos del programa y fueron advertidos de la situación difícil que afrontaban. En estos casos se da a los proyectos la posibilidad de escoger entre terminar voluntariamente o someterse a una auditoría a fondo en la que se hace una evaluación muy minuciosa de los puntos fuertes y débiles del proyecto. De ser necesario, también se puede emprender adicionalmente una auditoría financiera, de conformidad con las condiciones contractuales prevalecientes. Ya desde 1988 y desde los inicios del programa RACE se ha contado con procedimientos bien establecidos para la realización de auditorías anuales -de cuyos resultados se debe dar cuenta públicamente- de los proyectos de IDT. La transparencia queda garantizada a través de la publicación de los criterios de evaluación, evaluación que realizan expertos independientes y cuyos resultados se transmiten directamente a los Estados Miembros.