A quién representan las organizaciones de la sociedad civil en la UE, y cómo
La representación democrática es la base sobre la que se sustenta cualquier sociedad democrática. Sin embargo, la percepción que se tiene de la UE es que no resulta tan representativa ni tan democrática como podría ser. Asimismo, las OSC han alcanzado una enorme relevancia a la hora de configurar las agendas, pese a lo cual se conoce muy poco sobre a qué o a quiénes representan. El objetivo principal del proyecto financiado con fondos europeos «The contribution of civil society organizations to representative democracy in the EU» (CIVDEMO) era dilucidar esa cuestión. Con una duración de dos años, hasta agosto de 2013, la iniciativa elaboró un estudio en el que se analizaba la forma en que las OSC contribuyen a la representación política en los distintos niveles de gobernanza de la UE. Se evaluó la noción de representación de las OSC, cómo organizan la representación y la influencia de su implicación en la UE sobre su forma de operar. Además, el trabajo abordó cuestiones más teóricas, entre las que se incluyen los tipos de representación política implicados así como la legitimidad del papel que ostentan las OSC. Así pues, el estudio situó a las OSC en un contexto político más amplio en la UE. La investigación también incluyó la recopilación de información cualitativa sobre los tres tipos de OSC. Los grupos denominados «de miembros» incluyen a miembros capaces de defender sus propios intereses. Los grupos «de causa» actúan a favor de una causa relacionada con entidades (los animales o el medio ambiente, por ejemplo) que no pueden representarse a sí mismas. Por último, los grupos «en favor de los débiles» representan a personas en situaciones de marginalidad cuya voz carece de peso. Las organizaciones concretas en las que se centraba el estudio no eran sino tres grupos dedicados a la defensa de causas relacionadas con la agricultura, el medio ambiente y la pobreza. La principal conclusión del proyecto fue que, pese a decirse que las OSC representan a las circunscripciones de su país, tienen dificultades para hallar intereses comunes a nivel de la UE, sobre todo las OSC que operan en áreas redistribuidas, como las de políticas de redistribución agrícola y social. Otra conclusión es que, para influir en las políticas, los grupos se valen de estrategias de acceso (el «lobbying», o grupos de presión, en el sentido convencional) y de voz (presencia en la esfera pública). Los frutos de CIVDEMO permiten a los funcionarios de la Comisión Europea comprender mejor la implicación de las OSC de los distintos países en los asuntos de la UE. El trabajo de la iniciativa resulta igualmente relevante para miembros del Parlamento Europeo e integrantes de la totalidad de los parlamentos a escala nacional que deseen valorar en su justa medida el papel que desempeñan las OSC en las cuestiones que afectan a Europa.
Palabras clave
Organización de la sociedad civil, debate público, democracia representativa, representación política, gobernanza, déficit democrático