Participación de Finlandia en el informe del IVPM
Finlandia se ha beneficiado mucho gracias a su participación en el cuarto programa marco (IVPM) de la Unión Europea, pero todavía puede avanzarse más, afirma un informe dado a conocer recientemente. La primera mejora importante del IVPM consistió en que, a diferencia de los programas anteriores, Finlandia se había convertido en miembro pleno. Esto también significó que la investigación en un proyecto europeo común dejó de ser una rareza para los investigadores finlandeses. En los dos programas anteriores, IIPM y IIIPM, Finlandia había participado en un total de 504 proyectos (77 y 427 proyectos respectivamente), pero en el IVPM el número se elevó hasta 1.850. El estatuto de Finlandia como miembro significó una reducción de las limitaciones en la participación de los investigadores finlandeses, y facilitó su integración en proyectos de investigación, e incluso el dirigirlos y coordinarlos. Las respuestas a las encuestas y entrevistas, que han ayudado a configurar la base del informe, indican que diferentes grupos de intereses han tenido experiencias diferentes. El principal interés de las grandes empresas, evidentemente, no era tanto la financiación de la UE, sino el descubrir que en el entorno IVPM podían llevar a cabo sus proyectos de investigación con más rapidez y a una escala mayor de lo normal. Las PYME, las universidades y los centros de investigación informaron que los proyectos de la UE habían sido utilizados en mayor medida para financiar proyectos de importancia estratégica. Es interesante comprobar que las organizaciones sin ánimo de lucro fueron las que dieron a conocer las experiencias más negativas, uno de los elementos inesperados del informe. Estos grupos sin ánimo de lucro se habían centrado principalmente en proyectos de telecomunicaciones, y el informe advierte que "su menor éxito en la utilización de los programas marco de la UE debería constituir una preocupación para las autoridades finlandesas responsables de promover la colaboración en el ámbito de la investigación en la UE". En conjunto, en el contexto del VPM la colaboración ha sido adecuada. Los comentarios sugieren que, en el caso de las empresas, había resultado más positiva la colaboración vertical (es decir, con otras empresas que ocupan un lugar más elevado o más bajo en la cadena de productos). La colaboración horizontal (es decir, con empresas competidoras) había sido escasa. El carácter "sumatorio" de los programas marco fue superior en las industrias menos intensivas en I+D. En otros términos, el IVPM permitió la realización de actividades de I+D en sectores que en caso contrario no hubiesen explotado todo su potencial de I+D. Finalmente, el informe concluye que, con independencia de las circunstancias individuales, la impresión global que se extrae de los comentarios recibidos es que, en el momento actual, están previstas muy pocas actividades de I+D fuera del entorno de colaboración de la UE. "Uno de los impactos más generales de la colaboración de la UE consiste en una mayor internacionalización de la investigación finlandesa, tanto en las universidades como en los centros de investigación y las empresas. Son pocas las organizaciones y empresas finlandesas que hayan efectuado actividades importantes de colaboración internacional fuera del marco de la UE, indica el informe.