La industria microelectrónica le pide a la Comisión que continúe brindándole apoyo financiero
Representantes del programa MEDEA se reunieron recientemente con funcionarios de la Comisión Europea para solicitarles que se le continúe brindando apoyo en el ámbito del próximo programa marco. MEDEA recibe financiación de Eureka y tiene por objeto estrechar los lazos entre los diversos actores de la industria microelectrónica europea. En estos momentos, la investigación y el desarrollo de proyectos de microelectrónica se financian en el marco del programa de tecnologías de la sociedad de la información (IST), pero aún no se ha decidido cómo se distribuirán los fondos comunitarios para la investigación y el desarrollo tecnológico a partir de 2002. Los representantes de MEDEA esperan que los debates que tendrán lugar próximamente contribuyan a garantizar que las prioridades de la industria microelectrónica se incluyan en la primera propuesta formal de la Comisión sobre la estructura del próximo programa marco, cuya publicación está prevista para febrero o marzo de 2001. La Comisión ha dejado en claro que esta propuesta estará orientada hacia los proyectos estratégicos a gran escala y que pondrá especial énfasis en la necesidad de establecer redes en el marco del espacio europeo de investigación. MEDEA considera que esto es una ventaja: "Sin dudas, el espacio europeo de investigación es un concepto válido. Lo que nos interesa poner en práctica...es un trabajo realmente avanzado a nivel universitario e industrial", expresó a CORDIS-Noticias el Dr. Gérard Matheron, director de la oficina de MEDEA, durante el foro MEDEA 2000, celebrado en París a finales de noviembre. "Deseamos establecer redes de excelencia y proponemos que se adopte una perspectiva industrial". Esto significa, en opinión del Dr. Matheron, utilizar fondos comunitarios para apoyar la investigación básica llevada a cabo en las universidades europeas y permitir que la industria se pueda dedicar a cuestiones más avanzadas. "Nuestra cooperación [con la Comisión Europea] era muy buena durante JESSE [el programa anterior a MEDEA], pero luego las políticas cambiaron. Queremos que en el futuro se llegue a un consenso sobre quién financiará cada aspecto de MEDEA +". Las conversaciones coinciden con la conclusión del programa MEDEA, de cuatro años de duración, que será sustituido por MEDEA +. Con este paso, se dará inicio a una nueva fase del desarrollo de la industria microelectrónica en Europa. MEDEA ha sido aclamado como un gran triunfo, con resultados impresionantes, tanto por las organizaciones que han participado en sus proyectos como, a través de EUREKA, a nivel político. "Las empresas europeas cuentan ahora con una posición internacional más fuerte...y la investigación y el desarrollo europeos de semiconductores se han duplicado desde 1993 y son cinco veces mayores que en 1995...MEDEA constituye el modelo puntero a nivel mundial para la investigación transnacional cooperativa, precompetitiva, y demuestra cómo la cooperación puede reducir los períodos de desarrollo, los riesgos y los costes", afirma un documento de la oficina de MEDEA. "Descubrimos que, como resulta tan difícil y costoso desarrollar nuevas tecnologías, es mejor colaborar para poder avanzar", planteó el Dr. Matheron. Para describir este proceso, él ha utilizado el término "co-opetición", que indica que los competidores cooperan y luego compiten, por lo que comparten ideas genéricas básicas. "Deseamos que se unan más empresas a MEDEA +...lo que muestra una clara voluntad de preparar I+D a nivel europeo, con vistas a potenciar la competitividad de la industria microelectrónica de Europa". Tres empresas europeas de microelectrónica se encuentran entre las diez más importantes a nivel mundial, Infineon technologies (Siemens), STmicroelectronics y Philips semiconductors, que fueron clasificadas en las posiciones ocho, nueve y diez, respectivamente, en 1999. MEDEA considera haber contribuido significativamente al éxito que éstas han tenido. MEDEA se nutrió de las experiencias de JESSE (1989 - 1996), cuyo objeto fue cerrar la brecha tecnológica entre las empresas europeas y sus homólogas de Estados Unidos y Asia. Sin embargo, MEDEA se propuso objetivos con más amplias miras. "MEDEA consideró cómo las empresas europeas de microelectrónica podrían alcanzar un liderazgo temprano en ámbitos básicos, escogidos estratégicamente: los multimedios, las comunicaciones, las aplicaciones automotrices y de tráfico, las técnicas de diseño y las bibliotecas, las plataformas tecnológicas basadas en tecnologías de CMOS, y las tecnologías de la industria manufacturera", explica la oficina de MEDEA. El programa estima que, gracias a su ayuda, se crearon unos 50.000 empleos en Europa entre 1993 y 1998. Esto se logró en el marco de su colaboración con diferentes socios de institutos (10 por ciento), universidades (13 por ciento), empresas de gran tamaño (38 por ciento) y pequeñas y medianas empresas (39 por ciento). MEDEA+ tiene por objeto seguir desempeñando un buen trabajo. "Somos un mosaico de naciones y para poder competir en pos de nuestros objetivos tenemos que colaborar", afirma el presidente de MEDEA, Jürgen Knorr. "Es mucho lo que está en juego y quien no se apure se quedará esperando un autobús que ya habrá pasado...Europa debería convertirse en un líder en el ámbito de los semiconductores". "MEDEA+ es un proyecto verdaderamente europeo, que se lleva a cabo en el marco de Eureka", añade Gérard Matheron. Hasta la fecha, más de 150 socios de 55 proyectos, provenientes de 12 países, han sido considerados para su inclusión en el programa MEDEA +. MEDEA ayudará a encauzar cerca de 2.000 millones de euros hacia la industria microelectrónica en los próximos cuatro años". El Sr. Knorr espera que la Comisión Europea comparta los objetivos de los socios de MEDEA. "Juntos necesitamos apoyo financiero para [implementar] nuestras ideas [de] dar impulso a la investigación que pueda competir globalmente. Esta es una de las ideas principales de MEDEA+."