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Después de un espacio europeo de la investigación, ¿debe contemplarse un espacio europeo de educación?

La eurodiputada holandesa Elly Plooij-van Gorsel, autora de un informe relativo a la propuesta de la Comisión Europea sobre el espacio europeo de investigación, ha expuesto a Noticias CORDIS las medidas -tales como el establecimiento de un espacio europeo de educación- que cal...

La eurodiputada holandesa Elly Plooij-van Gorsel, autora de un informe relativo a la propuesta de la Comisión Europea sobre el espacio europeo de investigación, ha expuesto a Noticias CORDIS las medidas -tales como el establecimiento de un espacio europeo de educación- que califica de necesarias para la consecución del espacio europeo de investigación. La propuesta de espacio europeo de educación de la señora Plooij ya ha generado un amplio asenso, tanto en la Comisión de Industria, Comercio Exterior, Investigación y Energía del Parlamento Europeo, como por parte de Achilleas Mitsos, Director General de Investigación de la Comisión Europea. "Después del espacio europeo de investigación debería concretarse un espacio europeo de enseñanza superior. Si bien la educación sigue siendo responsabilidad de los Estados miembros, en virtud del principio de subsidiariedad [...] si lo que queremos es, en el plazo de 10 años, alzarnos al primer puesto de las economías más competitivas del mundo, y aspiramos a una economía del conocimiento, entonces nada de eso se puede concebir sin un espacio europeo de educación", aseveró la señora Plooij en una entrevista exclusiva con Noticias CORDIS. La concreción de tal proyecto es la única forma de fomentar en toda la UE el nivel de calidad de los investigadores que hace falta, según advierte la señora Plooij, y la única forma de que los investigadores adquieran el reconocimiento general. Es más, la necesidad de cooperación se deja sentir en otros ámbitos, dijo, como en los de movilidad de los investigadores, organismos de financiación de la investigación y apertura de los programas nacionales de investigación. "A nivel de institutos científicos y entidades encargadas de subvencionar la investigación apenas hay cooperación. En ausencia de estructuras específicas para ello, se echa en falta la complementariedad entre investigación nacional y europea", concreta la eurodiputada Plooij, quien añade que debemos replantearnos las circunstancias vigentes y superar los límites actuales, y forjar lazos de cooperación en lo intermediario, de forma que los científicos puedan tomar parte en los programas de investigación de otros Estados miembros. La eurodiputada no olvida, sin embargo, las barreras a estas condiciones optimizadas de cooperación, como puede ser la disparidad de sistemas de pago y de sistemas de pensiones, que resulta ser un obstáculo evidente a la movilidad. La señora Plooij destaca asimismo que en lo relativo a la financiación de la investigación prevalecen los intereses nacionales: "Son muchos los Estados miembros que tienen especial interés en gastar su dinero en el propio país. Lo cual constituye una verdadera barrera de índole burocrática". La flexibilidad, tan importante por el carácter evolutivo y progresivo de la ciencia y la tecnología, es otro asunto pendiente, asevera la señora Plooij, quien expresa su satisfacción por que varios Estados miembros hayan propuesto más flexibilidad en el VI Programa Marco, sin dejar de subrayar que fueron éstos quienes "mataron" la flexibilidad del V Programa Marco, al empeñarse en acciones clave específicas dotadas con presupuestos fijos. "Está bien saber que [los Estados miembros] desean más flexibilidad; espero que se atengan a un principio que ya defendíamos antes", puntualizó la señora Plooij. El valor añadido europeo tampoco debería desatenderse en los planes de investigación europea de la Comisión, afirmó la eurodiputada a Noticias CORDIS. Ámbito éste que podría contemplarse en el dictamen del Centro Común de Investigación (CCI). Éste, a pesar del proceso de reconversión positiva al que ha sido sometido en los últimos años, dijo, "carece de propósito claro en cuanto a valor añadido europeo". Un reto para resolver en el VIPM, así lo indicó la eurodiputada. La señora Plooij aspira a que el CCI pase a asumir un papel más determinante en la promoción de la investigación europea, y preconiza la puesta en marcha de una exposición virtual o sitio web, como plataforma de sensibilización de la población europea sobre la investigación europea y de énfasis de la "importancia de la investigación europea para nuestra economía y nuestra calidad de vida". Un servicio de esas características también podría facilitar los intercambios de estudiantes e investigadores. Dato acaso sorprendente, la señora Plooij, quien no procede de uno de los grandes Estados miembros de la UE, no siente excesiva inquietud por el papel futuro de los países más pequeños en la investigación europea. Otros han expresado su preocupación ante el principio de geometría variable, que con absoluta certeza se ejercerá con más frecuencia en lo sucesivo, y por la propuesta de la Comisión de centrar el VI Programa Marco en los grandes proyectos. "La calidad siempre es lo primero en el Programa Marco [...]. En los pequeños países hay calidad. También cabe la posibilidad de que sumen esfuerzos en el marco de proyectos, centros de excelencia y en las manifestaciones de geometría variable", dijo la señora Plooij. En cambio, se mostró algo molesta con la renuncia a los proyectos menores: "No existen pruebas científicas de que los proyectos grandes superen, en eficacia y éxito, a los pequeños, por lo que no hay motivo alguno para pasar directamente, entre los Programas Marco V y VI, de lo pequeño a lo grande. Me gustaría que se ejecutaran un par de casos de prueba, empezando, por ejemplo, con la tecnología de la información y las comunicaciones, y las ciencias de la vida [...]. No tires nunca por la borda lo que no hayas podido sustituir", termina la señora Plooij. En el sentido de mantener el apoyo a los proyectos pequeños, en el informe Plooij se estrena propuesta relativa a los programas "huérfanos", que se describen como campos de investigación que aun careciendo del apoyo de grandes grupos de presión auguran valor añadido europeo. Preguntada sobre el carácter subjetivo del valor añadido europeo, la señora Plooij insistió en que se dejara de reproducir las investigaciones llevadas a cabo en Estados Unidos. Promoviendo sus dotes, Europa creará valor añadido, dijo. La eurodiputada pide que se pongan en marcha proyectos huérfanos en el desarrollo de nuevas drogas, campo éste de no muy elevado nivel de beneficios financieros, pero cuya investigación no deja de ser importante. ¿Es realista la ambición que sustenta la propuesta de espacio europeo de investigación? "Sí y no", contesta la señora Plooij. Barreras sigue habiendo, "aunque es mejor que no tener ambición".

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