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La AEE proyecta crear un ecosistema espacial artificial

Un nuevo proyecto de la Agencia Espacial Europea (AEE) examina formas de utilizar excrementos humanos para recrear un ecosistema artificial durante los vuelos espaciales. El sistema propuesto proporcionará oxígeno y agua, y permitirá que los astronautas cultiven sus propios al...

Un nuevo proyecto de la Agencia Espacial Europea (AEE) examina formas de utilizar excrementos humanos para recrear un ecosistema artificial durante los vuelos espaciales. El sistema propuesto proporcionará oxígeno y agua, y permitirá que los astronautas cultiven sus propios alimentos. El proyecto MELISSA (Alternativa de soporte microecológico a la vida) se propone ofrecer un sistema práctico destinado a vuelos espaciales de larga distancia que pueden durar años, y en el curso de los cuales no se tira nada, ni siquiera los excrementos humanos. El proyecto es más avanzado que otros sistemas de reciclaje utilizados en la nave Mir o en la estación espacial internacional, que purifican el agua y reciclan el dióxido de carbono exhalado, pero no tratan de reciclar los residuos orgánicos para la producción de alimentos. Christophe Lasseur, miembro del equipo del proyecto MELISSA en el centro técnico de la AEE en los Países Bajos, ha dicho: "Estamos creando un ecosistema artificial que utiliza los microorganismos para procesar los residuos de modo que podamos cultivar plantas." El sistema utiliza cinco compartimentos separados pero conectados entre sí. En las tres primeras secciones los residuos se descomponen progresivamente utilizando distintos procesos de fermentación. En el cuarto compartimento se cultivarán algas o plantas para producir alimentos, oxígeno y agua. El quinto compartimento es el lugar donde vivirán los "consumidores", o astronautas. Lasseur compara este sistema con un lago: "En el fondo hay cieno (excrementos en bruto) que se somete a fermentación anaerobia (sin oxígeno) en la oscuridad. Más arriba hay luz pero no oxígeno. A continuación hay oxígeno, y el amoníaco puede transformarse en nitrato. En la superficie hay dióxido de carbono, oxígeno y luz. Es aquí donde pueden prosperar plantas de mayor altura." En las afueras de Barcelona (España) se está construyendo una pequeña planta piloto donde se está llevando a cabo un ensayo con tres ratas, que consumen aproximadamente la misma cantidad de oxígeno y de dióxido de carbono que un ser humano. Se prevé que la planta esté en pleno funcionamiento en 2005, cuando los cinco compartimentos trabajen en conjunto. El paso siguiente consistirá entonces en construir una planta de mayor tamaño para realizar ensayos con seres humanos. En definitiva, dice Lasseur, el tamaño de la planta de procesamiento dependerá de qué es lo que se va a cultivar: "Si se quiere vivir del trigo, se necesitarán unos 10 metros cuadrados de superficie de cultivo por persona, mucho más que si uno se contenta con algas." Aquellos que tengan ansias de conocer todo lo relacionado con el cosmos podrán encontrar más información sobre la exploración del espacio por el ser humano visitando el nuevo servicio en la web de la AEE, dedicado a vuelos espaciales tripulados, que se encuentra en la referencia que aparece más abajo. El sitio ofrece información dividida en cinco grandes apartados: Astronautas, la Estación espacial internacional, Investigación en el espacio, y El próximo paso - la educación y el futuro. Los visitantes pueden utilizar el sitio para acceder a una amplia gama de información, desde cómo se vive en una nave espacial hasta la posibilidad de encontrar otras formas de vida.