Una investigación muestra que los monopolios de telecomunicaciones continúan dominando el mercado de banda ancha
La Asociación europea de telecomunicaciones competitivas (ECTA) ha realizado una investigación que demuestra que los operadores nacionales de telecomunicaciones conservan el control del mercado de banda ancha, a pesar de los intentos de la UE de ofrecer a los consumidores europeos una gama más amplia de opciones. Las leyes de la UE estipulan que los antiguos monopolios de telecomunicaciones compartan sus líneas telefónicas con sus competidores, pero la investigación pone de manifiesto que sólo se accede de hecho a un porcentaje mínimo de las conexiones europeas de red de banda ancha a través de líneas liberalizadas de las empresas de telecomunicaciones nacionales. Más de un año después de haber tenido que instaurar medidas para facilitar el proceso de liberalización, sólo el tres por ciento de los 4,1 millones de líneas de suscriptores digitales corresponden a las empresas que acaban de entrar en el mercado. El consejero delegado de ECTA, Paul Evins, cree que la dificultad de la coubicación es uno de los motivos de la falta de penetración de las nuevas empresas en el mercado. "Las pocas nuevas empresas que entran en el mercado no son capaces, en la mayoría de los países, de coubicar y adquirir líneas de manera económica y puntual," ha afirmado. La investigación pone de manifiesto que sólo Alemania y Dinamarca están efectuando avances significativos en la liberalización de las líneas telefónicas. En Dinamarca se han entregado 40.000 líneas a empresas competidoras, y en Alemania, 623.000.