La demanda, necesaria para incentivar la intensidad de la investigación en las empresas del Reino Unido
Según concluye un informe del Reino Unido, la clave para aumentar la inversión en investigación privada radica en el fortalecimiento de la demanda de la investigación de parte de la empresa, más que en aumentar la oferta de ideas y servicios procedentes de las universidades. El informe Lambert, encargado por el Gobierno del Reino Unido, tiene por objeto estimular el debate acerca de una colaboración más estrecha entre la empresa y las universidades. Entre las recomendaciones del autor del informe, Richard Lambert, figura una línea de nueva financiación para la investigación orientada a las empresas, más responsabilidad y flexibilidad para las universidades, la simplificación del proceso para la protección de la propiedad intelectual, fomentar nuevos tipos de redes formales e informales entre los empresarios y académicos, y trabajar juntos para aumentar la capacidad de empleo de los licenciados. En la presentación del informe el 4 de diciembre Richard Lambert declaró: "Soy muy optimista acerca del potencial económico que las empresas del Reino Unido pueden obtener a través del desarrollo de una mayor colaboración con las universidades. También está claro que, para llevar a cabo este potencial se requerirá de la acción concertada de las universidades y las empresas, y del apoyo del gobierno". La recomendación fue bien acogida por el ministro de Economía, Gordon Brown, quien respondió con las siguientes palabras: "Un aspecto central de nuestro próximo presupuesto y revisión del gasto será el papel que el gobierno deberá desempeñar para ayudar a las universidades y empresas a enfrentarse a [...] nuevos retos - juntos debemos propiciar el éxito de nuestros centros de excelencia en la próxima generación de ciencia". El problema de la demanda es casi único en el Reino Unido, según el informe. En comparación con otros países, la empresa británica no se caracteriza por la intensidad de la investigación, y la inversión en investigación ha disminuido bastante en los últimos años. "La investigación en el seno de las empresas británicas se concreta en una serie limitada de sectores de la industria, y en unas pocas grandes empresas. Todo ello ayuda a explicar la brecha de productividad entre el Reino Unido y otras economías comparables", afirma el informe. Uno de los motivos por los que se elaboró el informe era garantizar que el Reino Unido es capaz de capitalizar dos nuevas tendencias, que incluyen una mejora de la cooperación. Las empresas se están apartando de un sistema en el que la mayoría de la investigación se lleva a cabo en los laboratorios, alejándose de los competidores, para adoptar uno en el que se busca activamente la colaboración. La investigación se está globalizando también. Las multinacionales están optando por localizar sus centros de investigación en sus mercados más importantes, que no se sitúan necesariamente en su país de origen. "Estas tendencias tienen grandes implicaciones para las universidades, que son potencialmente socios muy atractivos para las empresas", afirma el informe. "Los buenos investigadores académicos operan en redes internacionales: saben qué trabajos de vanguardia se están llevando a cabo en su campo de actividad en todo el mundo". Las universidades tienen también la ventaja, en comparación con las instalaciones de investigación del gobierno y de las empresas, de que "se ponen al día constantemente gracias a la llegada de personal altamente capacitado".
Países
Reino Unido