Un sistema basado en un escáner de láser sirve para la lucha contra la falsificación
Un equipo de científicos británicos del Imperial College London y la universidad de Durham anuncia en la revista Nature el descubrimiento de una nueva forma, asombrosamente simple pero eficaz, de luchar contra gran parte del fraude relacionado con los documentos y productos de marca. Los científicos explican que casi todos los documentos en formato de papel, tarjetas de plástico y diferentes embalajes poseen un código de identidad físico único que es creado por las imperfecciones aleatorias microscópicas de la superficie. Esta "huella digital" es intrínseca, y las imperfecciones son diminutas, tanto que es casi imposible replicarlas. Según el catedrático de nanotecnología del Imperial College London quien dirigió el estudio, Russell Cowburn, con un escáner de láser portátil es fácil leer estos patrones únicos. El sistema también es barato, los escáner de campo se podrían fabricar por menos de 1.000 euros. "Lo bueno de este sistema es que no hay necesidad de modificar el producto que se pretende proteger con etiquetas, chips o sellos", declara el doctor Cowburn. El proceso de detección de las variaciones sobre la superficie se basa en un fenómeno óptico conocido como moteado de láser. La luz que surge de un láser enfocado es coherente, es decir, las fases están relacionadas, pero cuando ésta incide sobre una superficie rugosa microscópica como un trozo de papel se dispersa, produciendo un patrón de "motas" de luz oscura y clara. Los fotodetectores del escáner pueden digitalizar y registrar este patrón. La técnica se usa ya habitualmente para medir la rugosidad de las superficies de metal y papel, y para visualizar la sangre en vivo. Según los científicos, las motas de láser podrían registrar rápidamente la identidad de un documento o pieza de embalaje de forma eficaz y barata. Para ello, se podría colocar un lector de láser al final de la línea de producción. Conforme el producto, que puede ser una tarjeta de identificación o una parte del embalaje, pasa, el escáner registra la huella digital y la envía a una base de datos informatizada. El proceso de registro podría durar tan sólo una milésima de segundo. Existen principalmente dos formas de aplicar esta tecnología. Una posibilidad es utilizar el escáner sobre una zona del documento, generando un código que se guardaría en alguna parte de un archivo informático central. Cuando alguien intente utilizar el documento, éste se escanea de nuevo y se compara con la base de datos para su autentificación. De forma alternativa, el documento podría ser escaneado y la huella digital, en forma numérica, podría ser codificada e impresa de nuevo sobre, por ejemplo, un certificado de nacimiento en forma de código de barras. Cada vez que se presente el documento, éste se escanea y después se compara con el código de barras. Existe una amplia gama de aplicaciones comerciales para esta tecnología: desde asegurar documentos oficiales como certificados de nacimiento, pasaportes, tarjetas de identificación, CD y DVD de música y software, y billetes de banco, hasta para prevenir el fraude al poder comprobar el envoltorio de productos farmacéuticos, cigarros y otras utilidades. El doctor Cowburn y sus colegas están trabajando ahora con la escisión de empresa Ingenia Technology para lanzar la idea al mercado.
Países
Reino Unido