Se forma un grupo de proyectos de la UE para promover las tecnologías innovadoras de aguas residuales
La Comisión Europea ha decidido incentivar el desarrollo de nuevos procesos para el tratamiento de las aguas residuales municipales financiando dos nuevos proyectos, AMEDEUS y EUROMBRA, a través de la prioridad de desarrollo sostenible, cambio planetario y ecosistemas del VI Programa marco (VIPM). En esta situación de escasez creciente de agua dulce, limpia y segura, calificada como "la única mayor amenaza para la salud, el medio ambiente y la seguridad alimentaria mundial", la disponibilidad de agua en cantidad y calidad suficientes es fundamental para el desarrollo sostenible de cualquier sociedad. La Unión Europea promueve la protección de los recursos hídricos a través de la Directiva marco del agua (WFD), que aporta una política integrada para la gestión de los recursos hídricos. En la Directiva, el tratamiento de aguas residuales es un aspecto importante: se necesitan tratamientos eficaces y asequibles económicamente para devolver las aguas residuales al ciclo hidrológico sin efectos perjudiciales. El objetivo de estos dos proyectos es alcanzar este reto a través de la investigación y el desarrollo de la tecnología de membrana activada por sedimentos, comúnmente llamada biorreactor de membrana (MBR). Esta innovación reciente se aplica cada vez más a menudo para purificar las aguas residuales municipales y es considerada una tecnología clave para la purificación de las aguas residuales municipales en el futuro ya que es capaz de conseguir aguas residuales higiénicamente puras a la vez que muestra una fiabilidad muy alta a nivel operativo. En comparación con las tecnologías convencionales, el MBR permite la completa desinfección de las aguas tratadas, y se cree que eliminará también rastros de sustancias y otros contaminantes emergentes. Sin embargo, incluso con estas membranas sumergidas que ofrecen los precios más bajos, la tecnología MBR sigue siendo más cara que los procesos convencionales. Además, el mercado europeo de MBR está dominado actualmente por dos productores no europeos, a pesar de las muchas iniciativas para desarrollar sistemas locales de filtración de MBR. AMEDEUS y EUROMBRA, se llevarán a cabo en estrecha cooperación. Ambos proyectos, lanzados en octubre por un periodo de tres años, recibirán 3 millones de euros de financiación de la UE. Entre los dos consorcios reúnen a 25 universidades europeas, centros de investigación, empresas y operadores de plantas de MBR, además de una universidad sudafricana y dos australianas. Los proyectos esperan juntos reducir los costes económicos y de funcionamiento de la tecnología MBR en Europa y aumentar así la competitividad en relación con las tecnologías convencionales; aumentar la participación en el mercado de las empresas europeas en las plantas de MBR, tanto en la UE como a nivel mundial; facilitar la aplicación de las Directivas europeas sobre el tratamiento de aguas residuales y las aguas destinadas a la higiene del cuerpo, y aumentar el potencial de reutilización no potable de las aguas residuales tratadas. Más específicamente, AMEDEUS (desarrollo de membrana de aceleración para la purificación de aguas residuales urbanas) se centrará en precipitar el desarrollo de tecnologías europeas de filtrado de MBR competitivas y aumentar su aceptación reduciendo los costes económicos y de funcionamiento. El proyecto mejorará la tecnología de MBR para orientarse a dos mercados europeos principales: plantas pequeñas (semicentrales, equivalentes a una población de entre 50 y 2.000 habitantes), y plantas medianas (centrales, equivalentes hasta 100.000 habitantes). Dentro de AMEDEUS, el desarrollo de nuevos sistemas de MBR se realizará a través de un consorcio compuesto por 12 socios: cinco PYME que proponen nuevos conceptos de sistemas de filtrado de bajo coste y alto rendimiento; dos usuarios finales; tres instituciones sin ánimo de lucro y dos universidades, todos ellos con amplios conocimientos en investigación sobre MBR. Los socios explorarán soluciones para reducir los costes operativos relativos por ejemplo, al control de la contaminación, la optimización de la limpieza de la membrana, la disminución de la aireación, y de los costes de capital mediante la mejora de la aplicación del proceso de biorreactor de membrana. Además, se llevará a cabo un análisis sobre el potencial de estandarización, y se organizarán los esfuerzos encaminados a la transferencia tecnológica hacía Europa del sur y oriental con el fin de facilitar la penetración en estos nuevos mercados. Según el consorcio, AMEDEUS logrará hallazgos tecnológicos realistas y concretos para la tecnología de MBR, normalizará el uso de esta tecnología para el tratamiento de aguas residuales municipales y mejorará la competitividad del mercado de MBR en Europa. El objetivo principal de EUROMBRA, por otro lado, es desarrollar soluciones sostenibles y asequibles para el nuevo tratamiento avanzado de aguas residuales municipales basado en tecnología de MBR. Se logrará a través de un programa de investigación múltiple diseñado para abordar fenómenos restrictivos clave como las incrustaciones y las obstrucciones. Fundamental para el éxito del programa, según los socios del proyecto, será el aprovechamiento del conocimiento especializado, la realización de experimentos específicos, aunque interrelacionados, y la incorporación de aspectos clave del diseño del sistema y relativos al funcionamiento, estos últimos incluyen la hidrodinámica y la transferencia de masa, la especiación de los contaminantes y los impactos dinámicos.