András Siegler espera un aumento de la colaboración internacional en el VIIPM
El Director de Cooperación Científica Internacional tiene planes de aumentar las actividades y dar una mayor relevancia a la cooperación internacional (INCO) en el VIIPM en concordancia con la declaración de András Siegler respecto a "una pronunciada curva de aprendizaje" de la Dirección General de Investigación en el VI Programa Marco (VIPM). La cooperación internacional en investigación es ahora más importante que nunca, declaró a Noticias CORDIS el Dr. Siegler, "en un momento en el que la globalización aparece diariamente en los periódicos no es muy difícil considerar la internacionalización de la investigación también como un fenómeno que está muy presente". Ahora que la investigación se está subcontratando con más frecuencia, principalmente en las economías emergentes, Europa tiene interés en conservar dentro de sus fronteras actividades como la investigación, que son calificadas por el Dr. Siegler de "actividades de alto valor". Pero a Europa no le basta simplemente con retener lo que tiene, ya que el continente carece de investigadores altamente cualificados, afirma el Dr. Siegler. Esta es una de las principales razones por las que Europa debe buscar fuera de sus fronteras e identificar talentos en el resto del mundo. "El objetivo no es reducir la fuga de cerebros", afirma el Director, "sino identificar las actividades que para Europa y otros países tienen un interés similar". Europa coopera con sus competidores porque "necesitamos masa crítica y queremos influir en las políticas de investigación, queremos contar con su excelencia científica". Pero las razones no son todas económicas, Europa tiene que trabajar junto a sus competidores porque quiere cumplir con sus retos mundiales. El Dr. Siegler puso los ejemplos de la gripe aviar, la seguridad alimentaria y el cambio climático, los cuales exigen de la cooperación internacional para solucionarlos. La colaboración internacional en investigación contribuye a que la UE cumpla con sus compromisos, por ejemplo, en desarrollo, ayuda, asuntos exteriores, y seguridad. Según el Dr. Siegler "la ciencia y la tecnología pueden contribuir a todo ello", y durante su primer año en la Comisión Europea se ha dado cuenta que esta aportación es ampliamente reconocida por las otras Direcciones Generales y los responsables políticos. En el VIPM, a INCO le correspondió un presupuesto de 660 millones de euros, de los cuales 60 millones se destinaron a apoyar la movilidad internacional. Los 600 millones restantes se dividieron en dos partidas: se reservaron 315 millones para la colaboración con los países en desarrollo y los países políticamente vecinos en cuanto a las necesidades de las regiones, como identificó una plataforma designada para tal efecto. Los otros 285 millones de euros se calificaron de "objetivo político", y se utilizaron dentro de las prioridades temáticas del VIPM a través de proyectos en los que participaban terceros países. Esta fue la primera vez que el programa completo se ha abierto a estos países. El segundo objetivo no se cumplió, aunque la pronunciada curva de aprendizaje haya originado un aumento de la participación de terceros países en la segunda mitad del VIPM. La Comisión publicó recientemente una convocatoria ascendente, "diseñada para mejorar la situación" según afirma el Dr. Siegler, y que permite a los proyectos que están actualmente planificados o les queda un mínimo de 18 meses restantes para solicitar la financiación, invitar a socios de terceros países a participar. El Dr. Siegler espera que esta convocatoria, cuyo plazo finaliza el 16 de mayo, suscite un enorme interés. Todavía no se han perfilado los contenidos exactos del VIIPM, pero con el aumento general del presupuesto más o menos garantizado, INCO es probable que se beneficie de una mayor financiación. Habrá de nuevo dos capítulos dentro de INCO, declara el Dr. Siegler, correspondientes a las dos secciones del VIPM que compartieron 600 millones entre ellos. En relación con la apertura completa del Programa Marco a terceros países, el Dr. Siegler declaró que, en su opinión, este tipo de colaboración "debería acontecer de forma natural, cuando ambos socios encuentren un interés mutuo". La financiación se aportará a través de la sección "Coordinación" del VIIPM. Una nueva iniciativa del VIIPM, también de esta sección, servirá de plataforma para que los Estados miembros aprendan entre ellos de las actividades bilaterales de investigación y exploten las sinergias, según explicó el Director. Dentro de la línea "Capacidades" del VIIPM, la Comisión tiene planes de crear una "INCO-NET", que será muy similar a las actuales ERA-NET. En el pilar de "Ideas", es "implícitamente posible" que terceros países sean capaces de acceder a la financiación del Consejo Europeo de Investigación. El Dr. Siegler destacó que la investigación básica es internacional por naturaleza, si bien añadió que no quería adelantarse a los debates que se celebrarán en el seno de este Consejo. Para el cuarto y último pilar del VIIPM, "Personas", habrá más subvenciones para apoyar las colocaciones internacionales, y más becas de retorno para ayudar a los investigadores que quieran regresar a sus países de origen. Por último, la Comisión quiere crear y fortalecer vínculos con los investigadores europeos expatriados, y por ello está creando "ERA-LINK" La iniciativa abrirá los canales de comunicación y sensibilizará sobre las oportunidades que presenta Europa. Ahora que los programas marco están totalmente abiertos a los investigadores de terceros países, se podría cuestionar si los Acuerdos de Ciencia y Tecnología son todavía relevantes. El Dr. Siegler así lo cree. Varios países están todavía interesados en firmar este acuerdo que, según opina el Dr. Siegler, ayudará a estructurar la colaboración y establecerá las condiciones para los derechos de propiedad intelectual. "Me gustaría que cobraran más importancia en el VIIPM. Son muestra de la voluntad política y constituyen la base para los intercambios y la reciprocidad", afirma.