Una plataforma inteligente de gestión energética maximiza la eficiencia de los edificios
En todo el mundo, los edificios y su construcción suponen el 36 % del consumo energético total, lo que, a su vez, significa el 40 % de las emisiones directas e indirectas de CO2 (Perspectiva Energética Mundial). Una respuesta evidente sería construir edificios más eficientes desde el punto de vista energético, pero cada vez hay más estudios que indican que, a pesar de las intervenciones, las construcciones no responden tan bien como cabría esperar. Uno de los problemas de las iniciativas para la eficiencia energética es que el proceso de auditoría energética suele realizarse durante un determinado periodo de tiempo y en un momento en concreto. El proyecto financiado con fondos europeos TOPAs (Tools for cOntinuous building Performance Auditing) empleó un principio de auditoría continua de rendimiento, que ofrece una visión más detallada del rendimiento de los edificios y tiene en cuenta el uso que se les da y su estado climático. El resultado es un análisis integral cuyas predicciones de uso energético se aproximan mucho a la realidad. TOPAs desarrolló una plataforma basada en el internet de las cosas (IdC) para ayudar a que los responsables de las instalaciones, los propietarios y las empresas de servicios energéticos (ESE) estuviesen más informados y tomasen mejores decisiones sobre las actividades en el inmueble. Reducción en la brecha de rendimiento Es habitual que haya una gran diferencia —a veces de varias decenas de puntos porcentuales— entre las estimaciones de eficacia energética de un edificio y los valores reales, ya que los residentes pueden empezar a usar la energía de un modo totalmente inesperado. Otros posibles motivos de esta diferencia son las fluctuaciones (de actividades, etc.), las horas de apertura, el número de habitantes en un edificio o la inexactitud de los modelos de estimación empleados como base. Lo normal es que estas auditorías energéticas se realicen una vez al año y que sus resultados se comparen con indicadores clave del rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés). Este enfoque suele perder muchas oportunidades para implementar iniciativas de ahorro energético. El sistema de monitorización continua de TOPAs compara los KPI con datos reales, lo que fomenta la introducción de normativas para la gestión energética, como la ISO 50001. «La plataforma TOPAs es como un monitor de estado físico para edificios que aporta una visibilidad continua del efecto de las intervenciones sobre la energía en la gestión, el coste, la calidad del aire y la comodidad de los residentes», indica Boris Kantsepolsky. La plataforma consta de dos componentes principales. TOPAs Core permite a los usuarios extraer, procesar y analizar de forma rápida y sencilla grandes cantidades de datos sobre edificios. Los servicios TOPAs Add-on ofrecen herramientas de apoyo a las decisiones, lo que incluye toda una gama de modelos de predicción energética, modelos de utilización de edificios, diagnóstico y detección de fallos, supervisión de la calidad del aire y modelos predictivos para lograr que los inmuebles autogestionen sus operaciones de eficiencia energética. Con la ayuda de estas herramientas y durante el proceso de validación de la solución se integraron siete diferentes sistemas de gestión de edificios (BMS, por sus siglas en inglés) en seis construcciones distribuidas en tres emplazamientos, cada uno en una ciudad distinta (Cork, Dublín y París). La plataforma gestionó más de 177 000 000 mensajes generados por más de 3 500 puntos de datos. Kantsepolsky añade: «Los modelos de predicción energética de la solución (eléctricos y térmicos) disminuyeron entre un 11 y un 27 % la diferencia entre las predicciones de uso energético y los valores reales, y contribuyeron a un ahorro en energía de entre el 12 y el 37 % en todos los emplazamientos». Importantes ventajas sociales y medioambientales Al mejorar la eficacia energética y reducir el consumo de energía, la solución TOPAs minimiza el impacto medioambiental y aumenta la productividad y la salud de los residentes. Además, el fomento de las innovaciones en materia energética fortalece la competitividad europea y crea puestos de trabajo. «La reducción de costes y la mejora de la sostenibilidad fomenta que las empresas inviertan en un cambio social positivo y en mejorar la calidad de vida de la gente». Según Kantsepolsky, «la capacidad de implantación de la solución TOPAs en entornos complejos, exigentes y muy distintos entre sí demuestra sus ventajas para el mundo real, así como su potencial de réplica». Algunas de las herramientas desarrolladas dentro del proyecto TOPAs ya se han introducido en el mercado, como Bag-ERA, una empresa derivada del socio del proyecto CEA y creada a partir de una plataforma de «software» LINC (un programa de conectividad para la coordinación), que optimiza los sistemas de producción industriales. En lo que se refiere a la tecnología basada en el IdC, Fraunhofer desarrolló un modelo de predicción energética compatible con el IdC llamado IoMod™ e IBM presentó información sobre edificios con IdC para la gestión de instalaciones. Además, Azimuth/Hager integró los resultados de TOPAs en su solución de calidad del aire para hogares inteligentes.
Palabras clave
TOPAs, edificios inteligentes, energía, auditoría de rendimiento, CO2, internet de las cosas, sistemas de gestión de edificios, datos, herramientas de ayuda para tomar decisiones, diagnóstico, modelos de predicción energética
