Un proyecto de la UE traza la division digital
Un estudio dirigido como parte de un proyecto financiado por la UE ha analizado los modelos de uso de Internet en Noruega, Alemania y Austria, y ha revelado que los noruegos están más espabilados en términos digitales que sus vecinos. El estudio identificó también la aparición de un nuevo tipo de división digital, originada entre los que consumen medios de comunicación en línea y los que los producen. El estudio es el primero de una serie que elaborará CITIZEN MEDIA, una iniciativa financiada a través del área temática Tecnologías de Sociedad de la Información del Sexto Programa Marco (6PM). El objetivo del proyecto es desarrollar nuevos sistemas que permitan a los usuarios no profesionales consumir, crear y publicar contenidos para los medios de comunicación audiovisuales a través de una serie de plataformas o «comunidades en línea». El objetivo último es cerrar la creciente brecha digital en Europa. Los investigadores de SINTEF, el grupo de investigación independiente noruego y uno de los socios del proyecto, comenzó analizando las capacidades de información y comunicación (TIC) de las personas que viven en Noruega, Alemania y Austria, donde se pretenden crear a través del proyecto bancos de pruebas para las aplicaciones. Basándose en el análisis de las estadísticas disponibles de Eurostat y Statistics Norway, los investigadores identificaron cinco categorías de uso de Internet entre los diferentes grupos de población de estos países. El primer grupo más grande lo integran aquellas personas que carecen de capacidades en TIC. El estudio calcula que el 47% de los austriacos, el 39% de los alemanes y el 25% de los noruegos entran dentro de esta categoría de usuario. Las personas que carecen de cualquier tipo de capacidades de TIC suelen rondar los 45 años o más, y proceden de un entorno de ingresos bajos y escasa educación, y de hogares con pocos miembros. El mayor grupo de usuarios de TIC está integrado por aquellos que utilizan los ordenadores e Internet sólo de forma ocasional. Más del 51% de los alemanes afirman ser usuarios ocasionales con pocas capacidades en TIC, en comparación con sólo el 28% de los austriacos y el 27% de los noruegos. Por otro lado, el estudio reveló que el 23% de los noruegos utilizaban Internet para encontrar información sobre, por ejemplo, los servicios del sector público, en comparación con el 15% de los austriacos y el 5% sólo de los alemanes. Las personas de este grupo se caracterizan por tener un nivel relativamente alto de capacidades en TIC y de formación académica. Quizá una de las revelaciones más sorprendentes del estudio sea que solo unos pocos utilizan Internet como esparcimiento, para jugar a los juegos, ver videos o la televisión. Menos asombroso, es que los que utilizan Internet de esta forma suelen ser estudiantes varones con capacidades relativamente avanzadas. Un 14% del total de los noruegos forman parte de esta categoría, seguidos por el 9% de los austriacos y el 5% de los alemanes. Pero el resultado que más sorprende se refiere a la última categoría: usuarios avanzados, donde su hábitat natural parece centrarse exclusivamente en Noruega. Los investigadores identificaron un 11% de estas especies raras en Noruega, aunque no pudieron localizar pista alguna de ellos ni en Austria ni Alemania. Las personas de esta categoría suelen utilizar los ordenadores e Internet para una amplia variedad de actividades y tienen conocimientos en el diseño de web y la programación. Además de las cinco categorías trazadas, los investigadores analizaron también los estudios internacionales que hay sobre el uso creciente de contenidos generados por usuarios y las aplicaciones relativas a la red social o las «comunidades en línea». Descubrieron que los principales usuarios jóvenes de Internet probablemente sean participantes activos y productores de contenidos. Según el consorcio del proyecto, esto supone el comienzo de una nueva división digital, entre los que meramente consumen medios y los que también producen contenidos. El consorcio del proyecto afirma que emprenderá otros análisis sobre los modelos de usuario en España y en cuatro o cinco países europeos.
Países
Austria, Alemania, Noruega