La salud de los trabajadores en bares irlandeses mejora gracias a la prohibición del tabaco Según muestra un estudio, la contaminación del aire en los bares de Irlanda descendió de forma sustancial tras la aplicación de la prohibición de fumar en los lugares de trabajo en este país. Además, la salud respiratoria de los trabajadores de los bares ha mejorado considerab... Según muestra un estudio, la contaminación del aire en los bares de Irlanda descendió de forma sustancial tras la aplicación de la prohibición de fumar en los lugares de trabajo en este país. Además, la salud respiratoria de los trabajadores de los bares ha mejorado considerablemente desde que la prohibición entró en vigor en marzo de 2004. Un grupo de investigadores dirigido por Luke Clancy, del Research Institute for a Tobacco Free Society [Instituto de investigación por una sociedad sin tabaco], midió en 42 bares de Dublín los niveles de partículas minúsculas y de benceno, que se encuentran en el humo del tabaco, antes y después de la prohibición. También evaluaron la salud respiratoria de 73 trabajadores de los bares, primero antes de la prohibición y, de nuevo, un año más tarde. Los resultados se han publicado en la American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine [Revista estadounidense de medicina respiratoria y cuidados intensivos]. Tras la prohibición, comprobaron que los niveles de partículas habían descendido en un 83%, mientras que los niveles de benceno habían bajado un 80%. En lo que respecta a los trabajadores mismos de los bares, los resultados de las pruebas de función pulmonar mejoraron de forma radical entre los no fumadores y los trabajadores también afirmaron padecer menos síntomas de problemas de salud. Según la información recabada, su exposición a un ambiente con humo de tabaco durante el trabajo se redujo de 40 horas por semana, antes de la prohibición, a 25 minutos tras la misma. «Este estudio ha servido para mostrar que la prohibición de fumar en el lugar de trabajo puede llegar a tener efectos beneficiosos inmediatos para la salud del aparato respiratorio», afirman los investigadores en su trabajo. «Para comprobar cuáles son los beneficios a largo plazo, por ejemplo en lo referente a la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), el asma y las enfermedades cardiovasculares, serían necesarios estudios más prolongados, pero éstos son de esperar, dados los conocidos y dañinos efectos del humo del tabaco sobre los fumadores pasivos.» Esta investigación refuerza otros estudios que relacionan las mejorías en el estado de salud con la prohibición de fumar en los lugares de trabajo. Tras la entrada en vigor de una prohibición de fumar en Italia, un estudio reciente de ese país revelaba un descenso considerable de los ingresos hospitalarios por ataques al corazón entre personas de menos de sesenta años. En un editorial adjunto, Fiona Godfrey, de la Sociedad Respiratoria Europea, señala que si todos los países de Europa adoptaran una política similar a la de Irlanda, en la próxima generación se podrían evitar entre cinco y diez millones de muertes prematuras debidas al tabaquismo. «El artículo escrito por el Dr. Luke Clancy y sus colegas amplía las pruebas aportadas por otros estudios que corroboran que es cierto lo que decían todo este tiempo los detractores del tabaco», asevera Fiona Godfrey en su artículo. «Las prohibiciones de fumar en bares han reducido de forma sustancial los niveles de partículas diminutas, productos químicos y gases en el aire y han mejorado la salud de los trabajadores de los bares.» Países Irlanda
