Un atlas muestra las repercusiones de los fertilizantes en el medio ambiente El Centro Común de Investigación de la Comisión Europea ha publicado un atlas que muestra el grado de contaminación por nutrientes en Europa. Dicho atlas es resultado de la labor de FATE (Fate of Pollutants in Terrestrial and Aquatic Ecosystems, o «Destino de los contaminantes... El Centro Común de Investigación de la Comisión Europea ha publicado un atlas que muestra el grado de contaminación por nutrientes en Europa. Dicho atlas es resultado de la labor de FATE (Fate of Pollutants in Terrestrial and Aquatic Ecosystems, o «Destino de los contaminantes en los ecosistemas terrestres y acuáticos»), una iniciativa del CCI que investiga las repercusiones del uso de nutrientes en el medio ambiente. Los nutrientes son una fuente de alimento para plantas y animales. Sin embargo, la saturación del medio ambiente con nutrientes, principalmente por el uso de fertilizantes y otros productos agroquímicos, puede tener efectos nocivos, sobre todo en la calidad del suelo. Además, estos pueden reducir la calidad del agua, dada su capacidad de estimular el crecimiento excesivo de plantas y algas. Se considera que la agricultura, las depuradoras de aguas residuales y la industria son las principales responsables de esta contaminación con nutrientes, pero hasta ahora poco se sabía con precisión acerca de su función y de las repercusiones exactas de esta contaminación en la Unión Europea. Este atlas ofrece por primera vez datos paneuropeos sobre el suelo, el clima, la topografía y el uso del suelo; las prácticas agrícolas (fertilizante con estiércol y nitrógeno, excedente de nitrógeno); e información para calcular los vertidos de nutrientes procedentes de diversas fuentes y viviendas dispersas. Esta abundante información ofrece una visión clara de los efectos nocivos que los nutrientes y sus fuentes están teniendo en los ecosistemas. El atlas muestra, por ejemplo, que la gama de nutrientes excedentes en zonas agrointensivas varía mucho de unos países europeos a otros. Así, en los Países Bajos utilizan más de 200 kg/ha mientras que en Italia no superan los 40 kg/ha. También se han comprobado diferencias en los usos dentro de cada país: en Francia, por ejemplo, el exceso de nitrógeno total es de 50 kg/ha, pero sólo en la Bretaña francesa los niveles superan los 120 kg/ha. Gracias a la información ofrecida por el atlas, los científicos fueron capaces de mostrar la relación que existe entre la pérdida de nutrientes excedentes y la fertilización excesiva, con lo que la prevención es relativamente sencilla y económica. Asimismo, pusieron de manifiesto el estrecho vínculo que existe entre la creciente saturación de nutrientes que hay en el medio ambiente y la alta densidad de la producción ganadera. Por último, partiendo de diversas hipótesis acerca del futuro del cambio climático, los científicos lograron demostrar que la agricultura intensiva acarrearía un incremento del uso de fertilizantes y de la demanda de agua. Se espera que la información recabada por la iniciativa FATE permita mejorar la aplicación de la normativa que ya está en vigor, además de proporcionar argumentos científicos sólidos para elaborar nuevas normas en el futuro.