Los datos registrados califican a la pasada década como la más calurosa
La década de 1998 a 2007 es la más calurosa que se ha registrado, según los nuevos datos publicados por la Universidad de East Anglia (UEA), el Centro Hadley del Met Office y la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Mientras tanto, los datos que abarcan desde enero a noviembre sitúan a 2007 como el séptimo año más caluroso desde 1850. A principios de año, el Met Office de Reino Unido y la UEA pronosticaron que 2007 bien podría ser el año más caluroso que se haya registrado. Hasta el momento, los resultados siguen, no obstante, dentro del rango de temperaturas previstas. «Este año comenzó con un El Niño debilitado, la versión más cálida de La Niña, y unas temperaturas mundiales bastante por encima de la media a largo plazo», comentó el Profesor Phil Jones, de la Unidad de Investigación del Clima de la UEA. «Sin embargo, desde finales de abril el fenómeno de La Niña se ha llevado parte del calor de un año que podría haber sido incluso más caluroso». «2007 ha sido clasificado como el segundo año más caluroso en el hemisferio norte, siendo más cálido que en el hemisferio sur, donde figura como el noveno año más caluroso». También destacó 2007 por el bajo nivel de hielo del mar apreciado en el Ártico. La extensión de hielo del mar fue inferior al promedio en todos los meses del año, y se registraron descensos sin precedentes en julio, agosto y septiembre. Por primera vez desde que hay constancia en la historia, el Pasaje Noroccidental canadiense permaneció abierto durante cinco semanas. Los niveles del mar continuaron también en aumento. Las mediciones de los satélites indican que desde 1993 el promedio del nivel del mar aumenta unos 3 mm al año. Dentro de Europa, el año comenzó ventoso al arrasar la tormenta Kyrill grandes superficies del norte de Europa los días 17 y 18 de enero. Las lluvias torrenciales y los vientos que provocaron rachas que alcanzaron los 170km/h originaron daños generalizados y dejaron al menos 47 muertos. La primavera y el invierno europeos fueron de los más cálidos que se han registrado, con temperaturas 4° C por encima de la media mensual en enero y abril. Las elevadas temperaturas fueron también un problema en Europa sudoriental durante los meses de junio y julio, y las temperaturas máximas diarias llegaron a alcanzar en algunos lugares los 45 °C. Miles de personas murieron y los incendios forestales devastaron miles de hectáreas de tierra. De forma simultánea, el norte de Europa padecía un clima húmedo. Inglaterra y Gales registraron el periodo más húmedo en su historia entre mayo y julio desde que comenzaran los registros en 1766, y las extensivas inundaciones mataron a nueve personas y causaron más de 4.000 millones de euros de pérdidas en daños. La Dra. Vicky Pope del Centro Hadley, que se encuentra en Bali, Indonesia, asistiendo a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, ha afirmado que, «en los últimos días se ha conseguido crear una plataforma importante para el debate y se ha confirmado la necesidad de actuar urgentemente para luchar contra un aumento mayor de la temperatura mundial provocada por el comportamiento humano». Al comienzo de la Conferencia de Bali, más de 200 científicos pidieron a los responsables políticos asistentes al evento que actuaran de inmediato para reducir los gases de efecto invernadero. Los signatarios advierten que, a no ser que se tomen acciones, millones de personas correrán el riesgo de padecer fenómenos extremos como olas de calor, sequías, inundaciones y tormentas. Los datos del último informe proceden de redes de estaciones del clima terrestres, barcos y boyas situados en el mar, y de los satélites. Los datos son recopilados por los servicios nacionales meteorológicos e hidrológicos de los miembros de la OMM. Las cifras finales correspondientes a 2007 se publicarán en marzo de 2008.
Países
Reino Unido