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El estrógeno, relacionado con factores de riesgo de enfermedades cardíacas en varones jóvenes

Un estudio dirigido por investigadores de Polonia y Reino Unido ha demostrado que los niveles naturales de estrógeno en varones jóvenes están relacionados con factores de riesgo de enfermedades cardíacas. La denominada predisposición masculina a la enfermedad cardiovascular ...

Un estudio dirigido por investigadores de Polonia y Reino Unido ha demostrado que los niveles naturales de estrógeno en varones jóvenes están relacionados con factores de riesgo de enfermedades cardíacas. La denominada predisposición masculina a la enfermedad cardiovascular suele atribuirse a factores genéticos. El efecto de los niveles de hormonas también se ha relacionado con la cardiopatía isquémica, la aterosclerosis y el ictus, pero los diversos descubrimientos han resultado en cierta medida contradictorios. Hasta ahora no se había establecido una relación entre niveles de estrógeno en la juventud, cuando los sujetos son sanos y no muestran signo alguno de enfermedad, y factores específicos de riesgo cardiovascular. En un esfuerzo por comprender por qué las enfermedades cardiovasculares tienen más prevalencia en los hombres que en las mujeres de la misma edad y etnia, un equipo de investigadores dirigidos por el Dr. Maciej Tomaszewski de la Universidad de Leicester (Reino Unido) analizó datos de un grupo de 933 varones jóvenes y sanos cuya media de edad estaba en los 19 años y que participaron en el estudio de la «Asociación cardiovascular de varones jóvenes» (YMCA). En concreto, examinaron los niveles de hormonas en circulación, sobre todo estradiol y estrona, y buscaron indicios de asociación con factores de riesgo de enfermedades cardíacas. Los investigadores habían formulado la hipótesis de que las concentraciones de estrógeno elevadas durante la juventud podrían asociarse con factores que se sabe que conducen a enfermedades cardíacas en edades más avanzadas, como presión arterial elevada, peso corporal elevado y un perfil desfavorable de lípidos (colesterol). Descubrieron que los niveles de estradiol y estrona, que al combinarse forman estrógeno, tenían una relación directa con el total de colesterol: el estradiol se asoció con una merma en la producción de colesterol «protector» (HDL) y la estrona con la sobreproducción de colesterol «dañino» (LDL). Sus descubrimientos indican que la relación entre este desequilibrio en el colesterol y el incremento de los niveles de circulación de estrógeno era independiente de los efectos de otras hormonas sexuales (incluida la testosterona), la edad, el peso corporal, la presión arterial u otros factores. Está demostrado que los niveles de circulación de colesteroles en la adolescencia permiten predecir con fiabilidad el riesgo cardiovascular en la edad adulta. Los niveles de estradiol varían sólo ligeramente con la edad. Parece probable que la asociación entre el estradiol y los lípidos continúe en la madurez, y bien podría explicar la correlación entre los estrógenos y enfermedades cardiovasculares, como la aterosclerosis, que se manifiestan a menudo en hombres de avanzada edad. La edad de los sujetos fue un factor crucial en el estudio que nos ocupa, puesto que investigaciones previas sobre niveles de hormonas y enfermedad cardiovascular se habían centrado en hombres de mediana o avanzada edad. El Dr. Tomaszewski y sus compañeros estudiaron el efecto de los niveles de hormonas en un punto de la vida de los sujetos en el que no es frecuente la presencia de signos de enfermedades cardiovasculares. En hombres mayores, los efectos de la edad, los medicamentos y la presencia de otras enfermedades dificultan el establecimiento de relaciones directas entre niveles de hormonas y enfermedad. Pese a que los factores genéticos, ambientales y hormonales influyen en los niveles de colesterol y producción de hormonas, cada uno de ellos desempeña un papel limitado en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. En todo caso, los descubrimientos del presente estudio tienen importancia clínica. El estudio concluyó que «una asociación entre estrógenos y lípidos en hombres tiene su origen en una edad temprana, antes de que se aprecie ninguna manifestación clínica clara de enfermedad cardiovascular», y que «un aumento en la concentración de estrógenos en circulación podría agudizar el riesgo cardiovascular en hombres». El Dr. Tomaszewski comentó que no queda del todo clara la razón por la que estos estrógenos actúan como cardioprotectores en las mujeres mientras que en los hombres ocurre lo contrario.

Países

Polonia, Reino Unido

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