Reducir la reverberación acústica para hacerse oír
El sonido se propaga en forma de ondas que rebotan en todo tipo de superficies como paredes y techos y provocan un efecto de reverberación que interfiere en el sonido original. Este ruido o reverberación acústica dificulta la escucha del sonido original y reduce la calidad del habla, la música o cualquier otro tipo de sonido. El proyecto financiado con fondos europeos DREAMS («Dereverberation and Reverberation of Audio, Music and Speech») trabaja en el desarrollo de soluciones que contribuyan a reducir este efecto y así lograr una claridad auditiva mayor. Esta investigación podría mejorar los programas informáticos de reconocimiento automático de voz, los audífonos y la calidad de sonido de teléfonos móviles, tabletas y reproductores de música portátiles de todo tipo. Además podría dar lugar a diseños mejores de micrófonos, megáfonos y acústicas para espacios y encuentros grandes o pequeños. El proyecto, dirigido por la Universidad Católica de Lovaina, se ha centrado en cuatro ámbitos que permitirán obtener un conocimiento más profundo de los retos científicos que precisan solución: acústica en espacios cerrados, procesamiento de señales, psicoacústica (la manera en la que el organismo humano procesa el sonido tanto en términos psicológicos como fisiológicos) y procesamiento de sonidos y del habla. El equipo al cargo desarrollará modelos y algoritmos que permitan a los usuarios predecir la inteligibilidad y la calidad del habla con una precisión superior a la actual. Estos podrán aplicarse a la mejora de las señales acústicas para, entre otros usos, imitar mejor los sonidos y diseñar sistemas de sonido de mayor calidad. Los algoritmos podrán aprovecharse para mejorar la calidad de distintas grabaciones cuya calidad sea deficiente, una aplicación útil en los ámbitos medioambiental, forense y de la monitorización y la vigilancia policial. Un componente importante del trabajo del equipo consistirá en formar a doce científicos que se encuentren al inicio de sus carreras para que se erijan en líderes en este campo. DREAMS dio comienzo en febrero de 2013, finalizará en diciembre de 2016 y recibirá más de 4 millones de euros en virtud de una beca para «Redes de Formación Inicial» de las Acciones Marie Curie, gestionadas por la Agencia Ejecutiva de Investigación (AEI).Para más información, consulte: DREAMS http://www.dreams-itn.eu/ Ficha informativa del proyecto
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Bélgica