Recolección del calor solar para edificios cálidos y fríos
El proyecto SOcool, financiado con fondos europeos, desarrolló el SunOyster, una tecnología solar de concentración que puede alcanzar una alta eficiencia en la superficie, aproximadamente el doble que la de los módulos fotovoltaicos normales. Los espejos parabólicos siguen al sol todo el día y concentran la luz solar en un receptor, donde hasta el 75 % de la radiación directa se puede convertir en calor o, usando el receptor híbrido patentado al mismo tiempo, en electricidad y calor. Además, los enfriadores térmicos funcionan como una bomba de calor que extrae el calor y luego lo rechaza. Este calor de baja temperatura no se ha formado desde cero, sino que simplemente se ha movido y se puede aprovechar para calentar otra cosa. La tecnología se diseñó teniendo en cuenta los países soleados, en los que las altas temperaturas provocan que los edificios necesiten más refrigeración que calefacción.
De la demostración al mercado
El objetivo principal del proyecto era llevar el SunOyster 16 del prototipo funcional a la certificación (TRL 9), para poder comenzar con la producción en serie y el despliegue a gran escala. Esto incluyó pruebas exhaustivas de más de una docena de SunOysters en el lugar, desde Escocia hasta Zambia y China. «El éxito de este objetivo significa que nuestros clientes en los países de la Unión Europea (UE) pueden recibir subvenciones atractivas para instalar el dispositivo», explica Carsten Corino, coordinador del proyecto. Un objetivo secundario era demostrar la función de los pequeños enfriadores térmicos junto con la tecnología de SunOyster. «Aquí, no estábamos tan convencidos de nuestros resultados a pequeña escala», admite Corino. La falta de radiación solar completa y, en consecuencia, una única función de carga parcial del enfriador, reduce la eficiencia de adsorción. «En conjunto, creemos que el sistema es más adecuado actualmente para proyectos más grandes con una capacidad refrigerante de 100 kW o más». El equipo comprobó en persona que construir un producto de «hardware», especialmente uno grande de tecnología profunda, no es una tarea sencilla. Corino confiesa: «Sin un fuerte apoyo del Instrumento PYME de Horizonte 2020, probablemente no habríamos logrado cruzar el infame "valle de la muerte" en el camino hacia la producción en serie. Estamos muy agradecidos por haber recibido esta ayuda y esperamos poder devolverlo algún día en forma de reducciones de emisiones, empleos, contribuciones a la seguridad social y pagos de impuestos como resultado de un crecimiento exitoso».
Hacer viables las visiones ecológicas
SOcool ofrecería una respuesta eficaz a las urgencias medioambientales del futuro próximo. «En Alemania, un SunOyster 16 heat PVplus ahorra aproximadamente cien toneladas de emisiones de dióxido de carbono durante una vida útil de al menos veinte años. En el soleado sur de España o en Creta, ahorra unas doscientas toneladas», explica Corino. «Cuando alcance los números de instalación previstos en diez mil por año, el producto contribuirá significativamente a combatir el calentamiento global». Basado en el SO16 y gracias al conocimiento adquirido en seguimiento solar, el equipo ha desarrollado dos productos más: el SO8, más pequeño y liviano, y el motor fotovoltaico totalmente eléctrico con módulos fotovoltaicos convencionales. Con esta cartera de productos, está equipado para cubrir cualquier combinación de demanda de calor y electricidad de uso residencial o industrial. Para sus planes, es fundamental aprovechar al máximo el impulso de la transición energética en los países de la UE y aumentar la producción de sus receptores híbridos patentados en la UE.
Palabras clave
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