Lograr que los ciudadanos se unan a la transición energética
El camino hacia unos sistemas energéticos más respetuosos con el clima que contribuyan a mitigar el cambio climático requiere que la sociedad adopte totalmente los cambios, no solo los responsables políticos y las tecnológicas innovadoras más ecológicas. Esto se aplica a todo el espectro, desde la producción equitativa de energías renovables hasta el ahorro de energía mediante las conductas que eligen los consumidores y la defensa de políticas energéticas más respetuosas con el medio ambiente. Los buenos propósitos por sí solos no nos permitirán alcanzar los objetivos del Pacto Verde Europeo de reducir las emisiones a cero y de convertirnos en el primer continente neutro climáticamente para 2050. Un modo de que las personas acepten el cambio es a través de acciones sociales. Pero, ¿cómo y en qué medida acelera la innovación social nuestra transición a nuevos métodos energéticos? Esta es una de las preguntas que planteó el proyecto Social Innovation in Energy Transitions, SONNET en una entrevista a 6 000 ciudadanos de Alemania, Francia y Países Bajos para determinar cómo perciben las innovaciones sociales en materia de energía. Recopilaron ejemplos de innovaciones sociales en estudios de casos e informes nacionales. El proyecto SONNET también creó una tipología para comprender mejor la diversidad de las innovaciones sociales en materia de energía y «extraer recomendaciones para los innovadores sociales, los gobiernos locales y los responsables políticos tanto nacionales como de la UE», observa Adrienne Kotler, responsable de eventos, participación de las partes interesadas, comunicaciones y relaciones con los miembros en ICLEI Europe, socio del proyecto. El proyecto, financiado con fondos europeos, también elaboró dos guías prácticas «para examinar la dinámica de poder en las transiciones energéticas y determinar si el método de laboratorio urbano permite fomentar la innovación local en diferentes contextos».
Incentivos económicos para cambiar los hábitos energéticos
SONNET City Labs, por ejemplo, probó una amplia variedad de soluciones, como un programa de alquiler o préstamo de dispositivos eficientes energéticamente a hogares de rentas bajas en Amberes, contadores domésticos para controlar el consumo de energía y obtener recomendaciones personalizadas para alcanzar la eficacia energética en Varsovia o un programa de formación para el personal de mantenimiento de los centros escolares con el fin de ayudarles a convertirse en defensores de la «suficiencia energética» en Grenoble. Una conclusión esencial del proyecto SONNET fue que las personas entrevistadas estaban dispuestas a invertir en innovaciones sociales en materia de energía, pero los legisladores debían plantear los factores económicos. «En las condiciones adecuadas, alrededor del 90 % de los participantes invertiría en la generación descentralizada de electricidad renovable», señala Kotler. Principalmente citaron condiciones financieras. «Los proyectos que ofrezcan garantías financieras a los ciudadanos que inviertan en ellos, cubran posibles pérdidas y reduzcan la inversión mínima probablemente captarían una gran participación. Sin embargo, las innovaciones sociales en materia de energía también deben adaptarse a los contextos locales y atraer el interés de muchas personas diferentes, lo cual es posible aprovechando la gran diversidad de soluciones», explica Kotler. El proyecto SONNET también definió cuatro áreas prioritarias y los puntos de acción correspondientes a fin de que los futuros estudios y políticas aprovechen todo el potencial de la innovación social para la transformación de los sistemas energéticos.
La sensibilización, clave para lograr una energía sostenible
«Por ejemplo, la investigación debería concienciar a los investigadores y responsables políticos del ámbito del clima y la energía acerca del potencial de la innovación social, afinar la definición o definiciones de innovación social en materia de energía a fin de que sean más fáciles de comprender para su uso por parte de las instancias decisorias y mejorar los procesos de evaluación con el objetivo de determinar el impacto de tales innovaciones», concluye Kotler. El proyecto, dotado con tres millones de euros, logró formular satisfactoriamente las alternativas que funcionan y mejorar la sensibilización respecto a la innovación social entre las instancias decisorias del ámbito de la energía y el clima, a fin de mejorar las métricas. Para mostrar la diversidad de innovaciones sociales en materia de energía, el proyecto SONNET celebró congresos y talleres locales, nacionales y europeos para divulgar sus conclusiones con el fin de construir una Europa más ecológica y sostenible.
Palabras clave
SONNET, energía, UE, social, innovación
