Lucha contra la delincuencia desde los laboratorios
En la actualidad, las investigaciones sobre pruebas de microtrazas se enfrentan a varias limitaciones. En primer lugar, las técnicas de análisis actuales son muy subjetivas y requieren un alto nivel de especialización. En segundo lugar, requieren mucho tiempo y son caras. En última instancia, esto repercute en el número de casos en los que se pueden realizar análisis. Grégory Briche, coordinador del proyecto SHUTTLE, financiado con fondos europeos, ofrece más información al respecto: «Utilizamos cinta adhesiva para recoger muchas trazas (fibras, fragmentos, sangre, etc.) y el forense debe escanear la cinta para determinar la traza pertinente, lo que lleva mucho tiempo. A continuación, los forenses tienen que extraer la traza correspondiente, sabiendo que existe la posibilidad de que esta se dañe al hacerlo. Solo las trazas pertinentes se someten a análisis posteriores y siempre existe el riesgo de pasar por alto una que sea interesante». El equipo del proyecto SHUTTLE se propuso abordar estas cuestiones y crear un conjunto de herramientas que facilite el análisis de microtrazas recogidas en el lugar del delito.
El conjunto de herramientas de SHUTTLE
«El conjunto de herramientas combina cinco herramientas que ayudarán a resolver las dificultades actuales. Cada una de ellas, así como su interacción fluida, son necesarias para un funcionamiento óptimo», explica Briche. Una de las herramientas es una cinta microscópica que puede utilizarse directamente con el conjunto de herramientas. El conjunto de herramientas de SHUTTLE tiene «ojos» gracias a un microscopio automatizado. «Recopilará imágenes de trazas, realizará análisis espectrométricos del color, así como varios modos de iluminación, por ejemplo, polarización e iluminación con rayos ultravioleta», añade Briche. Los algoritmos de tratamiento de imágenes son el «cerebro» del conjunto de herramientas. Esto permite una clasificación más precisa de las trazas identificadas. «Incluye una tabla de vectores de parámetros para cada traza, como coordenadas en la cinta, color, características de polarización, morfología y clase, como sangre, fibra, vidrio», confirma Briche. Una base de datos y algoritmos de búsqueda son la «memoria» del conjunto de herramientas. «La base de datos contendrá los datos brutos recopilados por el microscopio y los algoritmos. Está elaborada de tal manera que los datos recopilados puedan correlacionarse con los obtenidos mediante otras técnicas», añade Briche. Los procedimientos de reconocimiento de patrones también forman parte del conjunto de herramientas. «Los algoritmos de búsqueda comprueban si hay muestras similares en la base de datos. Esto se utiliza para calcular el valor probatorio de un resultado», afirma Briche.
En pos del principio de Locard
A fin de desarrollar el conjunto de herramientas, el equipo del proyecto publicó una licitación para seleccionar posibles proveedores de servicios capaces de ayudar en su realización. «Ahora tenemos un conjunto de herramientas, pero podría mejorarse por varias razones», confirma Briche. Los avances incluyen el desarrollo de herramientas de reconocimiento. «Todavía están un poco lejos de lo que queríamos. Y algunos modos de observación no son satisfactorios», añade Briche.
El equipo del proyecto sigue perfeccionando sus resultados.
«La traza de la transferencia, en el espíritu de la principio de Locard, es esencial en la resolución de asuntos penales importantes», concluye Briche. El objetivo final es la creación de un conjunto de herramientas totalmente integrado que ahorre tiempo y reduzca la fatiga del investigador, al tiempo que ofrezca resultados precisos.
Palabras clave
SHUTTLE, análisis microscópico de trazas, conjunto de herramientas de SHUTTLE, investigación sobre pruebas de microtrazas, lugar del delito
