Ayudar a los propietarios de viviendas a decir sí a las reformas de eficiencia energética
Por algo llaman a Europa el «viejo continente». Tomemos, por ejemplo, su parque inmobiliario. De los 250 millones de viviendas que se calcula que hay repartidas por toda Europa, apenas un 10 % se construyeron en la última década. Eso significa que no solo son casas viejas, sino también muy ineficientes. De hecho, los edificios son los mayores consumidores de energía de Europa, responsables del 40 % del consumo total de energía de la Unión Europea (UE). Por suerte, estas viviendas ineficientes pueden convertirse en energéticamente eficientes mediante su renovación. El reto consiste en conseguir que los propietarios de viviendas acometan esas obras de renovación. Según la Fundación Europea del Clima, los ciudadanos de la UE están dispuestos a llevar a cabo reformas energéticas en sus hogares para, entre otras cosas, pagar menos en la factura de la luz. El problema es que muchos son reacios a hacerlo debido a los costes percibidos y a la complejidad que entraña organizar las obras de renovación. Para reducir la brecha entre deseo y reticencia existen iniciativas como el proyecto NEEM, financiado con fondos europeos. A través del Centro Nórdico de Hipotecas Energéticamente Eficientes (NEEM, por sus siglas en inglés), el equipo del proyecto pretende cerrar la brecha de la eficiencia energética en los países nórdicos. «La brecha de eficiencia energética describe el fenómeno por el que muchas renovaciones energéticas rentables no se llevan a cabo simplemente por la falta de concienciación de los hogares y los elevados costes de transacción», explica Astrid Nielsen, economista de Copenhagen Economics, entidad socia y coordinadora del proyecto.
Una solución para satisfacer la demanda
La investigación llevada a cabo por la prueba piloto confirmó que los hogares nórdicos están realmente muy interesados en recibir un buen asesoramiento sobre renovaciones energéticas. Cuando les llamó un asesor bancario, el 96 % dijo que deseaba recibir la revisión energética y digital de NEEM. Tras dicho examen, el 70 % de los hogares manifestaron su deseo de recibir ofertas más específicas sobre renovaciones energéticas concretas. Sabiendo que la demanda existía, el Centro NEEM se diseñó para proporcionar a los hogares la información y el apoyo que necesitaban a fin de llevar a cabo una renovación de la eficiencia energética con confianza. «Desarrollamos el centro como medio para simplificar y automatizar el proceso de búsqueda de reformas energéticas rentables destinadas a viviendas residenciales», añade Nielsen.
Recomendaciones basadas en datos y personalizadas
El Centro NEEM proporciona recomendaciones individuales, basadas en datos y fáciles de entender para optimizar la eficiencia energética de una vivienda. Además, el servicio es gratuito. Para empezar, se utiliza un medidor de eficiencia energética a fin de estimar el rendimiento real de eficiencia energética de una vivienda. El contador tiene en cuenta factores como el consumo de energía por hora, los datos meteorológicos, la estanqueidad al viento y el aislamiento. Con estos datos en la mano, el centro calcula los costes y el ahorro de la renovación energética para distintos niveles de etiquetas energéticas. Después de identificar la mejor etiqueta para una vivienda concreta, el cliente recibe recomendaciones específicas para llevar a cabo la renovación. «Nuestro objetivo es garantizar que lo único que deba hacer un hogar sea decir “sí” a fin de recibir un plan de acción a medida que sea rentable para cada hogar», señala Nielsen.
Automatizar la eficacia
El equipo del proyecto NEEM desarrolló con éxito una solución automatizada para facilitar la eficiencia energética en la rehabilitación de viviendas. Aunque queda trabajo por hacer para incluir pasos como la selección y coordinación de contratistas, en el proyecto se espera convertir su investigación en una solución comercial viable. «Cerrar la brecha de la eficiencia energética es esencial para alcanzar el objetivo de la Estrategia «Oleada de Renovación» de la UE destinada a renovar 35 millones de edificios para 2030, una cifra que, de alcanzarse, supondría una gran reducción del consumo total de energía de los edificios y pondría a la UE en el buen camino para alcanzar sus ambiciosos objetivos climáticos», concluye Nielsen.
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