Reciclaje textil: de la recogida al comercio
Los textiles y la moda se han identificado como grupos de productos prioritarios en el Plan de Acción para la Economía Circular de la Unión Europea (UE). Los textiles tendrán que recogerse por separado a partir de 2025, aunque hoy en día, menos del 1 % de los residuos textiles se reciclan en fibras reutilizables. Sin un cambio por parte de los fabricantes y consumidores, esta situación creará una brecha enorme entre la oferta y la demanda. El equipo del proyecto SCIRT, financiado con fondos europeos, aborda este problema emergente explorando todos los pasos de la cadena de producción de las prendas recicladas.
Herramientas para reciclar, clasificar y recortar
El objetivo del proyecto SCIRT es demostrar un sistema de reciclaje de textil a textil para materiales de posconsumo. Esto plantea varios retos, sobre todo a la hora de separar los textiles de manera eficaz. Según la coordinadora del proyecto Evelien Dils: «Uno de los principales retos con los que empezamos fue que la calidad de los hilos reciclados no se ajustaba a los requisitos de las marcas de moda. Lo que ha sido crucial en este sentido ha sido la mejora de la clasificación y el desmontaje de los residuos textiles antes de pasar al reciclaje y las mejoras en el propio proceso de reciclaje mecánico». Se probaron diferentes vías de reciclaje en laboratorios y en estudios piloto. Se exploraron métodos enzimáticos y métodos termomecánicos y mecánicos. En el socio del proyecto Valvan se desarrollaron dos tecnologías mecánicas para clasificar y recortar textiles con precisión a gran velocidad. Fibersort separa el material en función del contenido de fibra y el color mediante robots y tecnología de infrarrojo cercano. Trimclean toma las fibras separadas y las corta en pequeños segmentos de entre 20 mm y 100 mm. Los fragmentos se analizan con cámaras y detectores de metales para eliminar elementos ajenos a las fibras, como las etiquetas, loa botones y las cremalleras.
Herramientas para mejorar la circularidad
El proyecto SCIRT se diseñó para abordar todos los aspectos de la cadena de producción. Con esta estructura se revelaron muchos retos, pero como dice Dils: «Esto realmente reforzó la comprensión de los socios de la cadena de valor involucrados hacia la importancia de la colaboración más allá de las fronteras de la empresa, un punto crucial en la transición hacia un sistema más circular». Algunas de las herramientas desarrolladas para los socios de la cadena de valor son True Cost Calculator, creada para ofrecer a las partes interesadas una evaluación clara del coste social real de una prenda, teniendo en cuenta los aspectos financieros, ecológicos y sociales. Una herramienta para acceder a los criterios que permiten validar la circularidad, disponible mediante suscripción, permite a los usuarios evaluar los datos relacionados con la circularidad de un producto.
Centrar al consumidor
Europa genera más de quince millones de toneladas de residuos textiles al año. Las tendencias de la moda rápida agravan el problema al aumentar la tasa de eliminación y reducir la calidad textil. Las soluciones viables al problema de los residuos textiles deben atender las demandas de los consumidores. En el proyecto se organizaron talleres con consumidores y se obtuvo información sobre cómo motivar prácticas de consumo textil sostenible. Los consumidores se preocupan por la disponibilidad y asequibilidad de los productos reciclados, y responden bien a los incentivos económicos para reciclar la ropa vieja. Debido a la prevalencia del «blanqueo ecológico », es importante la necesidad de transparencia y de un etiquetado preciso en relación con las alegaciones de sostenibilidad. Las innovaciones tecnológicas y la apreciación de las demandas de los consumidores son esenciales, pero la mejora de la circularidad de la industria textil comienza con marcos políticos eficaces como el Reglamento sobre diseño ecológico aplicable a productos sostenibles. Las campañas educativas y los incentivos adecuados son cruciales, y en los últimos meses del proyecto SCIRT se trabajó para maximizar la visibilidad de sus resultados. De principio a fin, en SCIRT se ha cumplido el cometido y, como buena noticia para las partes interesadas, algunas prendas recicladas se podrán comprar en tiendas de marca a finales de 2024.
Palabras clave
SCIRT, reciclaje textil, Fibersort, Trimclean, True Cost Calculator, moda rápida, blanqueo ecológico, economía circular