Láser para revelar la calidad de los alimentos
Mediante la reflexión de la luz en una fruta u hortaliza se pueden determinar muchas propiedades sin que para ello sea preciso echarla a perder, gracias a una técnica de exclusivo análisis óptico y visual. El empleo de la luz de láser dentro y fuera del espectro visible hace posible recabar un amplio abanico de información. El dispositivo es capaz de determinar los niveles de azúcar, ácido y fibra -así como su textura y consistencia- de, pongamos, una manzana. Comparando la información así recabada con el contenido de una base de datos de niveles estándares, cabe efectuar la clasificación de alimentos. De esta forma, los productos frescos se clasifican con gran precisión en categorías de alta, mediana y baja calidad, echando mano únicamente de información óptica. Para manejar el equipo no se precisan conocimientos especializados debido a que las unidades autónomas están dotadas con cuanto material y programas necesitan para interpretar los datos obtenidos. Al no hacer falta una formación de ningún tipo, el equipo puede servir en supermercados que deseen efectuar sus propias pruebas de calidad. Además de su indiscutible utilidad en la investigación universitaria, esta tecnología no destructiva resultará de especial interés en el sector hortícola, en el que se gastan ingentes cantidades de dinero en deterioro de productos en aras de pruebas.