Adaptar las videoconferencias a las necesidades cotidianas
Las personas mayores suelen permanecer en casa o en centros especiales, y generalmente con una interacción social limitada o con posibilidades limitadas de ocupar su tiempo. Por eso, un proyecto de desarrollo interactivo de servicios sociales (SAID, del inglés Social Aid Interactive Development), financiado con fondos comunitarios, ha desarrollado un grupo de servicios telemáticos para la tercera edad, que puede mejorar la asistencia social a través de la infraestructura de la TV digital. Esto es posible gracias a una amplia plataforma basada en la TV digital que presta diferentes servicios en función de las necesidades particulares del usuario. Además de los servicios de vigilancia, alarma y ocio, uno de los servicios principales que presta es el de videoconferencias. Una interfaz de usuario simplificada ofrece la posibilidad de elegir la foto de la persona con el que uno se quiere comunicar de entre un grupo de fotografías. Las videoconferencias pueden ser útiles en diferentes empresas cotidianas, como las comunicaciones personales, las comunicaciones con los servicios sociales o sanitarios, y la petición de servicios a domicilio, entre otras. Como se puede controlar con un mando a distancia de TV, es fácil de utilizar y también constituye un medio económico de establecer comunicaciones en tiempo real. En esencia, se puede usar como un modo fundamental de hacer más agradable y más fácil la vida de las personas mayores.