Computación cuántica: qubit contra bit
La creciente necesidad de capacidad de cálculo y de computación ha aportado nuevos avances en la sociedad informática. La computación cuántica se ha considerado un avance innovador fundamental en la era de la informática. Similar a los ordenadores clásicos cuya unidad básica de información es el bit, un ordenador cuántico tiene una memoria formada por una secuencia de bits cuánticos (qubits). A diferencia de los bits que tienen valores binarios iguales a uno o cero, los qubits son capaces de tener más valores, es decir, uno, cero o una superposición de éstos, lo que permite un número infinito de estados. Un ordenador cuántico funciona mediante la manipulación de estos qubits con puertas lógicas cuánticas. Recurriendo a la nanotecnología avanzada (unión de Josephson escalable en estado solido y baja temperatura), el proyecto SQUBIT se centró en la fabricación de sistemas de puertas lógicas cuánticas. Esta tarea supuso el desarrollo de qubits de la unión de Josephson (estado de carga y flujo), tecnologías de electrón único y SQUID para conseguir la iniciación, el procesamiento y la lectura de información. Una parte importante del proyecto fue el desarrollo de qubits de flujo o qubits de corriente persistente. Éstos son circuitos mecánicos cuánticos micrométricos formados por bucles de metal superconductor interrumpidos por las uniones de Josephson. El mecanismo de unión de Josephson permite e inhibe el flujo de corriente entre los dos superconductores a través de la finísima barrera aislante dependiendo de las condiciones. Los qubits de flujo ofrecen un flujo de corriente persistente continua con la aplicación de un flujo externo, que depende de los parámetros de unión preestablecidos durante la fabricación. Con la ayuda de la dinámica cuántica coherente, se espera que la fabricación de este qubit superconductor forme la base para la creación de un gran ordenador cuántico escalable. Para más información, visite: http://fy.chalmers.se/~wendin/SQUBIT/