La clave de la seguridad en el mar reside en la información
En vista de las consecuencias devastadoras de los accidentes de buques petrolíferos se ha desarrollado tecnología para uso local y regional. Un ejemplo muy ilustrativo son los Servicios de Tráfico de Buques (VTS), el equivalente marítimo al control del tráfico aéreo, y el sistema de identificación automática (AIS), que establece la posición de buques en tiempo real y sus llegadas a puerto. No obstante, estos sistemas aún deben mejorar considerablemente. La comunidad de analistas de sistemas coincide en que es necesario diseñar sistemas más anticipativos. A pesar de todo, es importante que la responsabilidad no recaiga únicamente en el buque ni en el capitán del mismo. La solución propuesta para la UE fue un sistema de control integrado que hace partícipes a todos los agentes interesados y aúna información con tecnologías de la comunicación. El proyecto financiado con fondos comunitarios Marnis es uno de los responsables del éxito de eMaritime, una iniciativa de fusión de servicios y sistemas que se está desarrollando en la actualidad. Un sistema centralizado que se sirve del sistema Marnis y que incorpora la tecnología NSW (National Single Windows) se encarga de tramitar toda la información relevante de un barco. NSW es el nodo al que se conectan todos los agentes interesados autorizados. Los datos se almacenan en una base de datos electrónica denominada Safeseanet++ desarrollada por el proyecto Marnis. En la gestión del tráfico de buques (VTM) se incluye la mejora de las operaciones de búsqueda y salvamento. También se estudiaron temas como la seguridad, la protección y la intermodalidad de los puertos. El intercambio de la enorme cantidad de información involucrada se realiza mediante el AIS, pero en caso de que se vea desbordado puede utilizarse la plataforma de banda ancha Marnis. El concepto Marnis es la base del desarrollo de un sistema que aúna e integra a la perfección una tripulación cualificada, agentes interesados bien informados y tecnología de vanguardia. Gracias a él se obtendrá un alto grado de seguridad marina para la tripulación, los pasajeros, las embarcaciones y el entorno natural por el que se navega.