Nueva generación de invernaderos para garantizar el suministro hídrico
Los episodios de sequía en países de la ribera del Mediterráneo hacen saltar todas las alarmas, sobre todo en vista de la demanda creciente de suministro hídrico para hogares y cultivos. El proyecto Cycler-Support («Apoyo a la implementación de actividades de investigación del 6PM relacionadas con el uso y reciclado de aguas residuales mediante el empleo de sistemas de invernaderos de nueva generación adaptados a requisitos específicos») trató de dar una solución al problema. El proyecto investigó tecnología nueva como el reciclado de agua y el aumento de la utilidad de la misma mediante la inclusión de nutrientes añadidos y la recirculación de dióxido de carbono (CO2). Estudió una tecnología de invernaderos de nueva generación para lograr la viabilidad de dichos sistemas a gran escala. Cycler-Support se propuso que la horticultura de invernadero pasase de consumir agua a producirla gracias a la optimización del consumo hídrico. Esto implicó reducir al mínimo el riego y el enfriamiento por evaporación y además recuperar el agua condensada. Cycler-Support estudió al detalle sistemas de reciclado de aguas residuales para su empleo en actividades de riego, siempre teniendo en cuenta la normativa vigente sobre contaminantes y estudios anteriores relevantes. Desarrolló conceptos nuevos de reducción de costes que disminuyen el consumo eléctrico y contemplan la desalinización de agua marina. El proyecto tuvo en cuenta la economía agrícola en relación a la utilización de aguas residuales y la sencillez de integrar las tecnologías desarrolladas en las estructuras existentes. El coste del nuevo sistema de invernaderos triplica al actual, pero su viabilidad aumenta si se tienen en cuenta los beneficios medioambientales generados y que no es necesario el empleo de plaguicidas. Su viabilidad reside sobre todo en la utilización de plantas no comestibles, pues se elimina el riesgo de contaminación de la cadena alimenticia. Cycler-Support recomendó continuar las investigaciones mediante pruebas con prototipos y preparar módulos de formación destinados a la puesta en marcha de los sistemas nuevos. Para esto último se redactó una guía de implementación que entre otros beneficios permitiría aumentar la eficiencia hídrica, aprovechar aguas residuales urbanas y mejorar la capacidad hídrica del suelo. Al final del proyecto, sus socios celebraron un taller en conjunción con varios agentes de distintos países para difundir conocimientos y fomentar la comunicación entre expertos en la materia. El sistema propuesto también se publicó en distintas revistas con la intención de abrir nuevos caminos a la introducción de esta nueva forma de ahorrar agua respetuosa con el medio ambiente.