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Reportaje - Revisión de iniciativas para pasar del «eGovernment» al «we-Government»

Europa ha establecido un ambicioso plan para liberar todo el potencial de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) con el objetivo de satisfacer la demanda pública de unos servicios electrónicos públicos más inteligentes y más agrupados. Las audaces acciones impulsadas por proyectos piloto a gran escala tienen como objetivo materializar las ventajas anunciadas de la administración electrónica («eGovernment»).

Internet ha ido convenciendo a los consumidores, pero se ha enfrentado a problemas de interoperabilidad entre servicios y administraciones, así como entre países, y hasta la fecha muchos europeos siguen estando excluidos de la experiencia de la administración electrónica. Muchos países de la UE se encuentran entre los primeros diez puestos en la clasificación de preparación en materia de administración electrónica, pero el grado de implantación se sigue considerando bajo. Los servicios que están disponibles a menudo no son ni sofisticados ni atractivos, según los expertos, especialmente para los «nativos digitales», es decir, la generación que creció con Internet. «En otras palabras, la promoción a bombo y platillo de la administración electrónica no siempre tenía su reflejo en la realidad. Por lo tanto, el liderazgo de Europa en la administración electrónica es relativo», comentaba Neelie Kroes, Vicepresidenta de la Comisión Europea encargada de la Agenda Digital, con motivo de la puesta en marcha del Plan de acción de la UE sobre administración electrónica en 2010. El plan no consiste en un cambio incremental ni en promesas vacías, según apuntó la Sra. Kroes, sino en medidas prácticas y ambiciosas para impulsar la calidad, la estabilidad y la eficacia del sector público en Europa. Enfrentados a opciones económicas difíciles y a la compleja dinámica social en Europa actualmente, los ciudadanos europeos necesitan más que nunca formas sencillas e inteligentes de interactuar con sus administraciones. «Las TIC pueden transformar y mejorar de verdad los servicios públicos, al tiempo que reducen materialmente el gasto público», señaló la Sra. Kroes. Y la Agenda Digital pretende romper las barreras que bloquean los servicios de la administración electrónica de segunda generación. A fin de dar respuesta a las demandas crecientes y cambiantes de los ciudadanos, las administraciones públicas tienen que escuchar sus necesidades, y en este contexto la Web 2.0 y los medios sociales recurren a las aplicaciones de administración electrónica de primera generación, lo que está dando lugar a un paradigma nuevo de «we-government». Pasar de las palabras a los hechos La Comisión está pasando de las palabras a los hechos con su Plan de acción de administración electrónica y la Agenda Digital. «Si las administraciones públicas no están a la altura de los tiempos que corren, se arriesgan a verse abocadas a la irrelevancia o, lo que es peor», comentó la Comisaria Kroes, «a convertirse en un obstáculo para la competitividad y el compromiso cívico». El objetivo es aprovechar las contribuciones de los millones de ciudadanos «conectados», ya que esto constituye «una reserva inmensa de capacidades y talentos» que puede ayudar a las administraciones a mejorar la forma en que se diseñan y se prestan los servicios. Por su parte, la Comisión intensificará el uso que hace de la contratación pública electrónica («e-procurement»), mejorará la visibilidad de su presencia en la web, adoptará un enfoque más basado en «datos abiertos» y avanzará hacia una administración «sin papel» en la medida de lo posible, según un comunicado. La Comisión también está financiando una gran cantidad de proyectos innovadores, incluidos proyectos piloto a gran escala financiados por el Programa Marco para la Innovación y la Competitividad (PIC), para sentar las bases para seguir avanzando en la administración electrónica. Por ejemplo, proyectos piloto que ayudan a las administraciones a desarrollar servicios que, por ejemplo, facilitan en gran medida el desplazamiento a otros Estados miembros o las licitaciones de contratos transfronterizas. «Espero que podamos aprovechar las experiencias de estos proyectos piloto a gran escala. Tenemos que conseguir este mismo éxito en ámbitos nuevos como la justicia y la participación electrónicas», afirmó la Comisaria Kroes, así como resolver los problemas de interoperabilidad a los que se enfrentan las administraciones a nivel interno y entre Estados miembros. Asistencia sanitaria sin barreras El proyecto piloto epSOS («Servicios abiertos inteligentes para pacientes europeos») está facilitando la prestación de asistencia médica al ciudadano en cualquier lugar de la UE al eliminar los obstáculos lingüísticos, administrativos y técnicos. Actualmente hay dos nuevos servicios (ePrescriptions y Patient Summaries, «recetas electrónicas» y «resúmenes de pacientes») que ya están en marcha a modo de experiencias piloto. Para 2012, treinta mil profesionales usarán el sistema, según el coordinador del proyecto, Fredrik Linden de la Asociación sueca de autoridades locales y regionales (SALAR). Según sus palabras, el reto consiste en ampliar la escala de estos sistemas. Las organizaciones internacionales de normalización ya están seleccionando algunas, y el proyecto está trabajando con autoridades de los Estados Unidos para evitar que haya normas contrarias. Otro proyecto piloto a gran escala, STORK («Garantizar la identidad a escala transfronteriza»), está poniendo en marcha un sistema de gestión y autentificación transfronterizas de la identidad (eIDM). Gracias a este sistema, las empresas, los ciudadanos y los funcionarios públicos podrán usar sus documentos nacionales de identidad electrónicos para acceder a servicios públicos de relevancia en cualquier Estado miembro. Para ello, diecinueve Estados miembros están colaborando con el sector privado para levantar una arquitectura de referencia que conecte los sistemas de identificación electrónica nacionales de un modo interoperable. «El objetivo final del proyecto es facilitar la vida a los ciudadanos de la UE, ofreciéndoles formas seguras de acceder a servicios públicos electrónicos en otros Estados miembros», afirma Miguel Álvarez Rodríguez, director del proyecto STORK. Por otro lado, el proyecto PEPPOL («Contratación pública electrónica paneuropea») tiene como objetivo que cualquier empresa, grande o pequeña y en cualquier sector, pueda comunicarse de modo electrónico con cualquier institución europea a lo largo de toda la cadena de contratación pública. Por ejemplo, a través de formularios electrónicos sencillos y de datos reutilizables, una PYME portuguesa podrá presentar una oferta para una licitación de un contrato público local en Milán. El proyecto desarrolló soluciones para firmas, pedidos, catálogos y facturación electrónicos a lo largo de todo el ciclo del contrato. «La armonización de las firmas electrónicas ha sido uno de nuestros principales logros», afirma Andre Hoddevik, director del proyecto PEPPOL. «Al comienzo del proyecto aspirábamos a tener entre un 25 y un 30 por ciento de autoridades de certificación aceptadas para proveedores extranjeros, pero [actualmente] cubrimos el 100 por ciento de la lista de servicios de confianza e incluso algunos no incluidos en la lista, como algunos de Rusia.» Procedimientos transfronterizos sencillos También atiende a este ámbito el proyecto piloto SPOCS («Procedimientos sencillos en línea para servicios transfronterizos»). A partir de las aportaciones de PEPPOL y STORK, el proyecto SPOCS está trabajando para eliminar las barreras administrativas a las que se enfrentan las empresas europeas para poder ofrecer sus servicios en el extranjero. El proyecto ayuda a los emprendedores a constituir o ampliar empresas en otros Estados miembros. Su equipo ha desarrollado una plataforma que facilita el acceso a los puntos únicos de contacto creados para ayudar a las empresas a la hora de hacer frente a las cargas administrativas en el comercio transfronterizo. Y allí donde SPOCS tal vez se detiene, toma el relevo el proyecto e-CODEX («Comunicación sobre justicia electrónica a través del intercambio de datos en línea»). La movilidad, tanto de ciudadanos como de empresas, dentro de la UE va en aumento, lo que hace que las relaciones y la cooperación entre los distintos sistemas judiciales nacionales sean más complejas. El proyecto e-CODEX está haciendo frente a esta «complejidad» mediante un uso más inteligente y racionalizado de nuevas TIC, lo que supone una ayuda para ciudadanos, empresas, administraciones y profesionales jurídicos a enfrentarse a situaciones que requieran una reparación. Esto significa resoluciones más rápidas para disputas y transacciones transfronterizas más fluidas, todo lo cual mejora la competitividad de Europa. Si alguien compra en Internet una bicicleta de otro país europeo y el vendedor no la envía, las herramientas de e-CODEX le ayudarán a presentar una reclamación contra el vendedor. «Ya no habrá que acudir a diferentes agencias (y rellenar varios formularios); bastará con estar sentado delante del ordenador, y todo en el idioma propio», señala el coordinador del proyecto, Carsten Schmidt. Los gobiernos también pueden usar e-CODEX para cobrar multas, añade. «¿Exceso de velocidad en otro país de la UE? ¡Recibirá la multa correspondiente desde su propio país!» Hacia un mercado único digital Además de los progresos que están logrando STORK, PEPPOL y SPOCS, e-CODEX está ayudando a romper las barreras al mercado único digital. «Tanto los ciudadanos como las empresas deben poder beneficiarse de los servicios en línea en cualquier parte de Europa, independientemente de su país de origen», subrayó la Sra. Kroes. De hecho, Europa reúne todos los ingredientes -diversidad de culturas, idiomas y procedimientos- para ser el laboratorio del mundo para la innovación en la administración electrónica, sugirió la Sra. Kroes. Se necesitan aplicaciones concretas para satisfacer las demandas de los usuarios de tecnología de hoy en día, que son más hábiles y exigentes. Los proyectos piloto a gran escala allanan el camino para conseguir resultados concretos. «Hay que encontrar los problemas reales en nuestros proyectos piloto… y solucionarlos», afirmó la Comisaria en el acto de presentación del Plan de acción. «Esa es la receta para que cada europeo se digitalice.» Enlaces útiles: - epSOS - STORK - PEPPOL - SPOCS - e-CODEX - proyectos piloto a gran escala sobre administración electrónica - PIC Artículos relacionados: - La tradición científica polaca: de Copérnico al futuro pasando por Curie

Palabras clave

administración electrónica, eGovernment, we-government, agenda digital, plan de acción de administración electrónica, contratación pública electrónica, nativos digitales, mercado único digital