Promoción de la fitogenética participativa
Tradicionalmente, la agricultura ha dependido de la capacidad inherente de adaptación de las plantas cultivadas para producir rendimientos elevados en determinados entornos y periodos propicios para ello. Uno de los objetivos buscados en la fitogenética es incrementar la producción y la rentabilidad de los cultivos mediante el desarrollo y la implantación generalizada de variedades mejoradas. No obstante, las políticas seguidas a nivel internacional parecen promover una modalidad de agricultura industrializada que impone ciertos requisitos financieros y de infraestructuras que no se suelen dar en los países en vías de desarrollo. Ante esta situación, el programa de métodos de investigación Participatory Plant Breeding (PPB, fitogenética participativa) se desarrolló con el fin de lograr la mejora genética de los vegetales de determinada especie entablando una colaboración estrecha entre agricultores y científicos de distintas disciplinas. El proyecto de la UE Conpab («Taller consultivo sobre fitogenética participativa») fue fruto de una acción de apoyo específica tendente a formular estrategias en el marco de programas de PPB en zonas propensas a las sequías. El consorcio responsable organizó un taller al que asistieron científicos de seis países del sur de Europa y el norte de África. Sus objetivos fundamentales eran establecer una red de PPB, difundir metodologías y formular estrategias para la implantación de PPB en zonas expuestas a la sequía. La conveniencia de aplicar PPB fue un mensaje que se difundió en Argelia por medio de un taller de ámbito regional dirigido a autoridades políticas y científicas y en el que se prestó atención al cultivo de trigo, cebada, lenteja, haba y maíz. Las actividades realizadas por el consorcio de Conpab sirvieron para proporcionar información sobre las ventajas y las aplicaciones posibles de la PPB a agricultores de zonas con baja disponibilidad de agua. Es previsible que la aplicación de las estrategias propuestas redunde positivamente en la productividad de los cultivos y refuerce la competitividad de la agricultura en estas regiones.