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Liquid crystal display re-use and recycling (ReLCD)

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Reutilización y reciclaje de pantallas de cristal líquido

Las pantallas de cristal líquido (LCD) se utilizan en multitud de dispositivos cuyas ventas están creciendo, desde teléfonos móviles y consolas de videojuegos hasta televisores. Investigadores financiados por la Unión Europea desarrollaron nuevos métodos de reutilización y reciclaje que se espera reduzcan de forma significativa las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) asociadas a la incineración y la contaminación de las aguas residuales procedentes de vertederos.

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Gran cantidad de las pantallas LCD vendidas se acercan al final de su vida útil. Actualmente, la única forma de eliminar las pantallas LCD es la incineración o llevarlas a un vertedero. Ambos métodos son caros; la incineración produce emisiones asociadas al calentamiento global y los vertederos generan problemas de contaminación de aguas y dificultan la biodegradación. La Comisión Europea ha emitido una directiva que impone el desmontaje de las pantallas LCD con áreas superiores a 100 cm2. Por ello, el proyecto RELCD («Reutilización y reciclaje de pantallas de cristal líquido») se inició para desarrollar nuevas formas de maximizar la recuperación de las pantallas LCD mediante reutilización, reparación, refabricación, reciclaje y eliminación. En primer lugar, los investigadores determinaron un procedimiento rápido y rentable para decidir si las pantallas LCD todavía funcionaban. A continuación, desarrollaron una tecnología para reintegrar las pantallas LCD que funcionaban en procesos de reparación y producción. Para el caso de las pantallas LCD que no funcionaban, los investigadores evaluaron su procesamiento para su reutilización y reciclaje. También identificaron dos componentes de las pantallas LCD que podrían reutilizarse tras el procesamiento. Por lo demás, los procedimientos de reciclaje considerados incluyeron el desmantelamiento manual y el tratamiento mecánico. Los resultados del sistema piloto de laboratorio demostraron que el desmantelamiento manual era la estrategia de reciclaje más eficiente en general. No obstante, el tratamiento mecánico era factible para pantallas LCD sin mercurio. Para cumplir la directriz de la UE sobre eliminación de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), el equipo creó una prueba para sustancias peligrosas y una tecnología de desmontaje y reciclaje respetuosa con el medio ambiente. El proyecto RELCD también elaboró directrices para el diseño, la fabricación y el reciclaje sostenibles de las pantallas LCD, para su utilización en modelos futuros. La aplicación de los resultados del proyecto debería tener un impacto significativo en cuanto a reducir la enorme contribución de los RAEE así como su incineración y eliminación en vertederos. Todo ello permite vislumbrar beneficios importantes para fabricantes, consumidores y el medio ambiente.

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